Moratalla tendrá que recurrir a un crédito para pagar las nóminas

El Ayuntamiento de Granada tendrá que recurrir a un crédito a corto plazo por valor de 1.200 millones de pesetas para poder abonar la nómina de los funcionarios y los vencimiento bancarios correspondientes a los meses de agosto y septiembre, según anunció ayer el concejal delegado de Desarrollo Económico, José Antonio Aparicio. El concejal acusó al equipo de gobierno de Gabriel Díaz Berbel de haber autorizado en los últimos meses de mandato el pago de todas las órdenes pendientes, en lugar de satisfacerlas ordenadamente, para no causar un quebranto en Tesorería en los meses posteriores. "O intentaron tener contentos a los proveedores con motivo de las elecciones municipales o se trata de una operación contra el equipo de gobierno entrante", señaló Aparicio. El concejal de asuntos económicos dijo que desde el 15 de abril, fecha en que cayó en desgracia el entonces concejal de Economía, Pedro Revilla, el Ayuntamiento se apresuró a pagar unos 2.500 millones de pesetas, sin tener en cuenta las consecuencias que tendría en los meses sucesivos. La imposibilidad de cobrar el Impuesto de Bienes Inmuebles en la fecha prevista, el mes de junio, va a agravar aún más la situación económica en los dos próximos meses. El gobierno tripartito aún no ha decidido si pondrá al cobro el impuesto en el mes de septiembre, debido a los problemas causados por la irregular revisión del padrón de hace dos años. "Primero tenemos que aprobar el censo cobratorio y la emisión de recibos. A la vista de las incidencias de la revisión del padrón hace dos años, tendremos que hacer un análisis exhaustivo antes de decidir si lo sacamos al cobro", explicó.