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Dos de cada tres adoptantes en el extranjero pagan más para acelerar los trámites

Amaya Iríbar

La mayoría de los madrileños que desean adoptar un niño en otro país prefiere pagar más para acortar los plazos de espera. Dos de cada tres familias que iniciaron los trámites el año pasado consiguieron el certificado de idoneidad, que les acredita como futuros adoptantes, después de pasar por el Turno de Intervención Profesional para la Adopción Internacional de los colegios profesionales de psicólogos y trabajadores sociales. De esta forma superaron el primer trámite en un mes, después de abonar 109.000 pesetas, cuando los que optan por someterse al examen público gratuito pueden tardar en conseguir los mismos papeles entre ocho y nueve meses, según reconoce la directora gerente del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF), Esperanza García. El proceso de adopción internacional puede tardar entre 18 y 24 meses en resolverse.El dinero nunca es el problema. Una familia que decide adoptar un niño extranjero sabe que necesitará entre 2 y 2,5 millones de pesetas para resolver todo el papeleo, según los datos del IMMF. Los dos informes necesarios para superar el primer trámite -el certificado de idoneidad que acredita a los padres como futuros adoptantes exige un informe psicológico y otro económico-social- cuestan 109.000 pesetas en el turno privado (entre un 4,4% y un 5,5% del precio total del proceso).

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El tiempo es lo importante. Los adoptantes son en su mayoría parejas que llevan años intentando tener un hijo biológico, admiten los profesionales encargados de evaluar su situación concreta. Por eso están dispuestos a pagar un poco más si eso significa acortar los trámites, admite una pareja que optó por esta vía.

El año pasado, 523 familias obtuvieron su certificado de idoneidad de la Comunidad de Madrid después de haber pasado por las manos de un psicólogo y un trabajador social privados. El número total de solicitudes se elevó hasta 689. La comisión de tutela de la Comunidad, que debe avalar cada uno de estos documentos, resolvió 824 expedientes, algunos pendientes del año anterior. Un año antes optaron por el turno privado 415 familias. El turno se abrió en 1996, gracias a un acuerdo de colaboración entre los colegios profesionales y el IMMF. Desde entonces, 1.400 parejas han optado por él. Los precios -55.000 pesetas por el informe social y 54.000 por el psicológico- son siempre por trabajo concluido, no importa el número de entrevistas necesarias, lo que permite garantizar un servicio riguroso. Sólo alrededor de un 3% de los informes son negativos. Los 15 trabajadores de la sección de adopciones del IMMF -psicólogos y trabajadores sociales, pero también abogados- no podrían atender en un plazo prudente y satisfactorio todas las solicitudes de los padres, que crecen cada año.

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Sobre la firma

Amaya Iríbar
Redactora jefa de Fin de Semana desde 2017. Antes estuvo al frente de la sección de Deportes y fue redactora de Sociedad y de Negocios. Está especializada en gimnasia y ha cubierto para EL PAÍS dos Juegos Olímpicos y varios europeos y mundiales de atletismo. Es licenciada en Ciencias Políticas y tiene el Máster de periodismo de EL PAÍS.

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