Leni Riefenstahl como tabú
Soy un lector de EL PAÍS, del Herald Tribune (el mejor periódico de Europa) y de unos cuantos más en otros idiomas. No soy amigo de periodistas ni de sus fuentes, ni quiero serlo. No escribo correctamente el castellano, pese a que soy ciudadano español y leo EL PAÍS desde distintos puntos del mundo por razones laborales. Soy de profesión liberal, no pertenezco a partidos o afines y soy mayor de edad.EL PAÍS se está volviendo acomodaticio: ya no hay grandes reportajes o páginas con perfiles de algún personaje, se hacen las entrevistas con miedo del entrevistado y el entrevistador brilla más que el entrevistado.
En el extranjero la prensa española goza de mala fama: primero se insulta y se difama y, después del daño consumado, la rectificación como consuelo; no hay equidad.
Según la Universidad de Columbia, EL PAÍS está entre los 20 mejores periódicos del mundo, pero no está exento de la mala fama citada. Hay un progresivo descuido en la selección de los colaboradores; críticos que apelan al ataque personal en detrimento de la crítica periodística. Leni Riefensthal es un blanco favorito para la prensa. Y, lamentablemente, para EL PAÍS. ¿Por qué EL PAÍS la ataca de forma casi sistemática utilizando sólo una o dos palabritas. ¿Que le ha hecho Leni Riefensthal a EL PAÍS?
En el coleccionable Protagonistas del siglo XX, fascículo 11, página 260, se le acusa de "cineasta nazi" en un artículo no firmado (lo que significa que el periódico está conforme). Lo correcto sería "cineasta favorita del III Reich". ¿Es nazi Robert Fisk cuando escribió en este periódico sobre el poder del lobby judío americano? ¿Es nazi la judía Hannah Arendt por ser pareja sentimental de Martin Heidegger? Se critica a Riefensthal por haberse quedado trabajando en Alemania. Curioso: leí en EL PAÍS un texto de un crítico de cine en el que se reprochaba a Emir Kusturica haber abandonado la ex Yugoslavia en plena guerra para gozar "el dorado exilio americano". ¿Es nazi Kusturica?
Leni Riefensthal nunca permitió que el ministro de Propaganda del III Reich, Josef Goebbels, controlara su trabajo; Goebbels tenía a todos los artistas bajo su control... "excepto las producciones de Leni Riefensthal"; Leni Riefensthal escribió a Hitler solicitando la permanencia de un judío en su equipo en pleno auge de los decretos del señor Hitler contra los judíos, comunistas, gitanos. Hitler aceptó. El judío se llamaba Heinz von Jaworsky; Riefensthal compraba ropas en tiendas de judíos a pesar de estar prohibido por decreto; no tuvo reparos en tener como uno de los favoritos de sus cámaras en su filme Olympia (considerada una de las 10 mejores películas de todos los tiempos por la crítica estadounidense) al afroamericano Jesse Owens, la estrella de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936 (al que Hitler no le dio la mano). En septiembre de 1939, Leni Riefensthal se encontraba en Konsky (Polonia) como "reportera gráfica" de las tropas de Hitler. Pero como artista sensible no pudo soportar fotografiar el asesinato de 31 judíos por los soldados alemanes, "se quejó ante el general Walter von Reichenau sobre los sucesos de Konsky e inmediatamente volvió a Berlín". Por último, "nunca fue miembro del partido" (los entrecomillados pertenecen al libro Leni Riefensthal. The Fallen Film Goddness, Glenn B. Infield, 1976). ¿Soy nazi por decir la verdad sobre Leni Riefensthal?- , judío. ).
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