El Ayuntamiento retiene el cierre de una discoteca de Las Arenas

El Ayuntamiento de Valencia retiene desde hace unos días un oficio cursado por el servicio municipal de Actividades en el que se propone el cese de actividad y el precintaje de las instalaciones de la sala de fiestas Floridita, una de las dos discotecas que vienen funcionando de manera irregular en el recinto del balneario de Las Arenas. La propuesta aún no ha sido firmada por ningún miembro del equipo de gobierno que dirige Rita Barberá, a la que la oposición socialista ha acusado de otorgar un "trato de favor" a Residencial Beniluz,SL, la empresa que regenta ambas discotecas. La otra, Caballito de Mar, recibió ayer la autorización municipal para abrir, a pesar de que lleva funcionando, al igual que Floridita, desde principios del pasado mes de junio. La actividad de estas discotecas ha provocado quejas del vecindario, por el elevado nivel de ruido que generan. Pero ni las denuncias de los vecinos ni las actas levantadas por la Policía Local han surtido efecto alguno, a pesar de que las dos discotecas vienen funcionando sin licencia e incluso incumpliendo uno de los requisitos señalados en la propuesta de autorización de la actividad que impide ofrecer actuaciones en directo.