Asentamiento rumano
El barrio Virgen de Begoña ha sufrido las consecuencias de la instalación de un asentamiento ilegal, en el cual han malvivido en ocasiones más de ochocientas personas; también han tenido que soportar a los que aparecían con sus furgonetas para instalarse, tanto rumanos como portugueses; al no conseguirlo, pululaban por el barrio sin respetar a nada ni a nadie.Así durante año y medio. En este tiempo, los vecinos del barrio habíamos perdido casi todos los derechos, las libertades, la tranquilidad y la seguridad que una sociedad medianamente civilizada tiene en pleno sigloXX.
Surge el desalojo, aparecen voces, cada una diciendo lo que mejor les parece. ¿Dónde estaban todas esas voces durante este tiempo, es que entonces eran menos menesterosos viviendo entre escombros y ratas? ¿Qué hicieron las mismas para solucionar el problema de los vecinos?
En estos momentos se creen con derecho a levantar la voz y a enjuiciar a los ciudadanos, que tienen todo el derecho de protestar por las condiciones de vida que les imponían los gitanos rumanos. Ninguna alzó más la voz para ofrecer su barrio y alojar algunas familias de las existentes en el asentamieno y de esta manera aliviar la carga que sufría el de Virgen de Begoña.- .
