La Fiscalía de Málaga pide a los jueces que le informen de los sumarios contra Gil

La Fiscalía de Málaga solicitó el pasado miércoles a los siete juzgados de Primera Instancia e Instrucción de Marbella que le remitan todos los expedientes sobre presuntos delitos urbanísticos en los que figure el alcalde de Marbella, Jesús Gil, o algún miembro de la corporación municipal para poder agilizar los que estén paralizados. La petición de la fiscalía se extiende también a los asuntos archivados en los que Gil haya estado imputado. "Se trata de controlar y hacer un seguimiento de las causas, para en su caso dirigirnos a la Audiencia y ver si están paralizados", aseguró el fiscal jefe en funciones de Málaga, Antonio Morales. Por otro lado, la fiscalía malagueña comunicó ayer que no ha encontrado indicio de delito en el informe que le remitió la Cámara de Cuentas de Andalucía y que ponía de manifiesto que el alcalde no había pagado la cuota obrera de la Seguridad Social entre los años 1991 y 1993. El fiscal Morales no aclaró si el archivo de esta última investigación ha sido motivado por la prescripción del hecho o por la aplicación de la jurisprudencia del Supremo que no lo considera delito.

Por su parte, el alcalde de Marbella, Jesús Gil, acusó ayer al fiscal encargado del caso Atlético, Carlos Castresana, de filtrar las conclusiones del Servicio de Inspección del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para presionar a la Comisión Disciplinaria que debe decidir el próximo lunes si expedienta a la juez decana de Marbella, Pilar Ramírez. "Una inspección no puede hacer esos juicios de valor. Eso es un invento de Castresana", manifestó Gil en referencia a la propuesta realizada para expulsar a la magistrada de la carrera. En conferencia de prensa, Gil criticó que las "hipotéticas" conclusiones de la Inspección asuman la segunda ampliación de la denuncia formulada por el fiscal jefe anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, por las que se aportan nuevos datos en torno a la actividad económica de la magistrada y su familia.

"Ya se han olvidado de la otra acusación del narcotráfico", dijo Gil. La Fiscalía Antidroga ha respondido a su petición de un certificado de que está limpio en asuntos de droga diciendo que no está autorizada para dar tal información y que debe remitirse a los juzgados. Pero Gil lo interpretó como un tanto a su favor: el informe de Villarejo se refiere a causas seguidas en la Audiencia Nacional a las que no puede tener acceso, dice, al no ser parte ni estar imputado.

Gil volvió a la carga contra el juez del caso Atlético, Santiago Torres, por continuar con la causa principal de la que se ha desgajado el asunto de la publicidad de Marbella en las camisetas del club, y calificó de "esperpéntico" que su hijo Miguel Ángel, que no es funcionario, haya sido imputado de un presunto delito de malversación de caudales públicos y de tráfico de influencias, por intervenir en el contrato de publicidad municipal para tres caballos en 1995.