Conflicto de intereses
Muchas personas de buenos sentimientos estarían de acuerdo en la liberación de Pinochet o de cualquier otro criminal por razones humanitarias, si no fuera porque ello implica condenar a sus víctimas al más brutal desamparo. Si sólo hubiera un implicado, el general, en esta decisión sería comprensible la recién expresada magnanimidad del señor Matutes. Pero no nos equivoquemos: hay un conflicto de intereses. Si liberan a Pinochet antes del juicio, condenan a sus víctimas, que reclaman justicia. Si lo juzgan, reparan moralmente su dilatada tortura.- .
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