El PNV conservará la Diputación de Álava con el apoyo de EH si no avanza el pacto PSE-PP

Si no hay un acuerdo de última hora entre PSE y PP, la Diputación de Álava será del PNV y el nuevo alcalde de Vitoria será el popular Alfonso Alonso. La dirección regional del PP acordó ayer, como una cuestión de "dignidad política", no ceder a los socialistas el consistorio, por lo que el PSE no apoyará al candidato del PP a la Diputación, Ramón Rabanera. Sin embargo, EH ya se ha comprometido a prestar al PNV sus votos en la entidad foral. El presidente del PP, Carlos Iturgaiz, dijo ayer que el PSE "traicionará" a su electorado si deja que el PNV controle la Diputación.

El panorama de pactos en el País Vasco está al rojo vivo. El PP ve que se le puede escapar de las manos la Diputación de Álava. El PNV tiene el corazón dividido entre los partidarios de llegar a acuerdos con el PSE y quienes no se atreven a dejar de lado a EH. Y los socialistas empiezan a darse cuenta, aunque su secretario general, Nicolás Redondo, lo tenga asumido, de que puede quedarse en la oposición. Aunque las posiciones se consolidan, ningún portavoz de los partidos es capaz de hacer un pronóstico sobre las siglas que dirigirán las instituciones municipales y forales en Euskadi. El PP mantiene su particular duelo con el secretario general de los socialistas alaveses, Fernando Buesa, un negociador nato que está decidido a no apoyarles en la diputación si no le dan la alcaldía a su candidato, Jesús Loza.

Sin embargo, el presidente del PP del País Vasco, Carlos Iturgaiz, reiteró ayer que el Ayuntamiento de Vitoria es "irrenunciable". El PP empieza a digerir la crueldad que supone ganar las elecciones y quedarse en la oposición. Sin embargo, reiteran que no es su responsabilidad. "Si el PSE-EE no apoya al PP en la Diputación de Álava estará permitiendo que el PNV y HB, en definitiva Estella, gobiernen", advirtió, Iturgaiz.

El coordinador del PSE-EE, Rodolfo Ares, también insistió en que los socialistas no tienen intención de variar su postura con respecto a un pacto con el PP en Álava si los populares no ceden la alcaldía de Vitoria.

El PP esperará hasta cinco minutos antes de la constitución de los ayuntamientos, el sábado, para negociar con el PSE su apoyo en la diputación y el consistorio. El secretario general del PP, Javier Arenas, se declaró ayer "tranquilo" sobre esas posibilidades de gobierno, aunque preocupado sobre los acontecimientos que pueden desatarse si el PSOE no les presta su respaldo como partido más votado en ambas instituciones. Arenas llegó a declarar: "Ni me imagino ni quiero pensarlo ni se me pasa por la cabeza" otro comportamiento del PSOE, dijo Arenas, "y menos aún que acaben permitiendo el gobierno del Pacto de Estella", agregó en alusión a la alianza entre PNV, EA y EH.

Arenas aún no ha hablado directamente del asunto con su homólogo del PSOE, Joaquín Almunia, que tampoco le ha contestado a su oferta epistolar de una "reflexión conjunta" sobre Euskadi. Pero sí se atrevió a aventurar que el PSOE no facilitará en Álava los gobiernos de las instituciones más relevantes a partidos que no han sido los más votados. Añadió que ni el PP ni la sociedad entenderían jamás algo así porque sería "incomprensible" y porque "supondría no respetar los resultados plurales" del 13-J.

Por la mañana, ante el plenario de los parlamentarios del PP en el Congreso y el Senado, Arenas espetó: "Que los socialistas se anden con cuidado porque a lo mejor lo que hacen en Álava lo acaban pagando en Huelva".