El PP pierde la mayoría absoluta en Palma tras el recuento oficial

El PP ya no tiene mayoría absoluta en Palma de Mallorca. En la noche electoral, con el 100% escrutado, sí la tenía, pero el recuento oficial le ha quitado un concejal para dárselo a Unión Mallorquina (UM), que se convierte en el partido clave para la gobernabilidad del ayuntamiento. El PP pasa a tener 14 ediles, y UM dos. El cambio se ha producido tras anularse las votaciones en dos mesas por haber desaparecido las actas. La decisión de la Junta Electoral de Zona es provisional, todavía habrá que resolver los recursos presentados. Pero de confirmarse, el popular Juan Fageda ya no tendrá la alcaldía asegurada. El PP presentó a última hora de ayer un recurso en el que dice aportar precisamente las actas desaparecidas.

El PSOE en Palma de Mallorca mantiene sus 8 concejales; tres, el PSM, y dos Izquierda Unida-Els Verds.

El PP propone, en contra de lo decidido por la Junta, que se repitan las elecciones en las mesas cuyas actas se han anulado. Juan Fageda, el alcalde en funciones, al saber que estaba en cuestión su futuro excusó su presencia en un acto oficial mientras confía en su fe en Dios, según dice. Fageda protestó indignado porque un trámite administrativo legal vulnere lo decidido por la voluntad popular.

Por otra parte, el PP de Baleares se dirigió públicamente ayer, por primera vez, a su aliado imprescindible, Unió Mallorquina (UM), para proponerle un acuerdo global que sirva para restaurar las mayorías conservadoras perdidas. "El Partido Popular puede ofrecer mucho, puede ofrecer muchísimo, al otro partido (UM) en el caso que exista este posible acuerdo", así se expresó ayer en declaraciones a la Cadena SER Juan Verger, presidente del PP de Baleares y consejero del Gobierno regional.

Verger piensa tentar a la líder de UM, Maria Antònia Munar, con contrapestaciones del Gobierno central a cambio de los tres votos nacionalistas que configurarían con los 28 del PP una mayoría de centro derecha en el Parlamento.

"El PP cuenta con la Administración del Estado y desde luego tenemos muchas cartas en la manga para poder sacar, pero no es el momento. Queremos gobernar y nos sentaremos a negociar", dijo Verger.