Núñez y Navarro apuesta por la zona noble del centro de Barcelona

VIENE DE LA PÁGINA 1 Núñez y Navarro ha tenido en los últimos meses una intensa actividad compradora en el mercado inmobiliario. Algunas de las últimas operaciones han tenido el denominador común de haberse realizado en la zona noble del centro histórico de Barcelona y sobre inmuebles catalogados como patrimonio arquitectónico. A finales del año pasado, la empresa propiedad de la familia de Josep Lluís Núñez adquirió a Tabacalera el edificio que albergaba la sede de la antigua Compañía de Tabacos de Filipinas, situada en La Rambla de Barcelona, por un total de 1.800 millones de pesetas. La intención del grupo inmobiliario es realizar una inversión en el inmueble y convertirlo en un hotel de lujo. Esta inversión se ha efectuado en la zona alta de La Rambla, una área que ha ido a más en los últimos años tanto desde el punto de vista turístico como del puramente comercial. Otra operación que reúne la característica de haberse hecho sobre patrimonio arquitectónico es la relativa al inmueble que albergaba el desaparecido diario El Noticiero Universal, en la calle de Roger de Llúria de Barcelona. En este inmueble, Núñez y Navarro ha realizado una rehabilitación integral. Se trata de un edificio del arquitecto Josep Maria Sostres, de corte racionalista, que obtuvo en 1966 el galardón municipal al diseño. Al margen de estas operaciones concretas, el crecimiento del grupo Núñez y Navarro ha cobrado nuevo impulso en los últimos tiempos. La sociedad, que en los años sesenta y setenta se expandió por Barcelona y se hizo famosa por su predilección por las esquinas para edificar, sigue construyendo viviendas. Las últimas operaciones se han realizado en las calles de Miquel Planes, Folgueroles, Comtes del Bell-Lloc, República Argentina, Escoles Pies y paseo de Sant Gervasi. La empresa también ha realizado inversiones en el nuevo eje de oficinas situado al final de la calle de Tarragona.