El PA decidirá quién será el alcalde de Granada en un par de días

El Partido Andalucista, que se ha convertido en la llave para designar al futuro alcalde de Granada, se tomará un par de días de reflexión para decidir si opta por otorgar su confianza a Gabriel Díaz Berbel, del PP, o por el contrario, apoya un gobierno de izquierdas liderado por el socialista José Moratalla y en el que participaría Izquierda Unida. El candidato del PA, Jesús Valenzuela, que ayer se mostraba exultante al haber obtenido un acta de concejal por primera vez en 16 años, dijo que tomaría la decisión al margen de los pactos que su partido haga en otros municipios.

Los socialistas dan ya por hecho que Díaz Berbel ha sido desalojado de la alcaldía granadina después de cuatro años de gobierno. Cuentan inicialmente con el apoyo de Baltasar Garzón, de IU, con quien se sentarán a hablar de forma inmediata y quien a lo largo de toda la campaña anunció que no permitiría que el actual alcalde continuara. Tampoco pasan por alto que Valenzuela siempre ha sido un hombre de centro-izquierda que, además, fue delegado de Turismo de la Junta de Andalucía en los últimos años a raíz, precisamente, del pacto regional entre PSOE y PA. El candidato socialista, José Moratalla, declaró en la madrugada de ayer que "Granada ha votado por el cambio" y se puso "a disposición de los ciudadanos para liderar una nueva época" en la ciudad. Aunque manifestó que aún no se había puesto en contacto con Garzón o Valenzuela, señaló que "la gobernabilidad no será difícil". "Hoy es un día de felicidad e ilusión", dijo al conocer el resultado final del escrutinio, que obliga al pacto por fuerza. Los andalucistas llevaban sin ser votados en Granada desde las elecciones de 1979, en que consiguieron una notable representación. Un pacto que les forzó a renunciar a la alcaldía de Granada a cambio de la de Sevilla les supuso que la ciudad les volviera la espalda durante 16 años y que, una y otra vez, cada una de sus propuestas se estrellara contra la indiferencia ciudadana. De ahí que su regreso al Ayuntamiento tenga un fuerte contenido, no sólo simbólico, sino político: vuelven y lo hacen como auténtico partido bisagra. Tanto IU como el PA tendrán un enorme peso si finalmente ambos llegan a un acuerdo. El andalucista Jesús Valenzuela se ha caracterizado en los últimos años, además, por su compromiso social. ATS de profesión, fue alcalde del pueblo granadino de Alquife, en donde trabajó activamente con los sindicatos para evitar a toda costa el cierre de las minas y las pérdidas de puestos de trabajo. Con esos antecedentes, se sitúa políticamente a la izquierda del PA, como dejó bien sentado hace unos días en una conferencia de prensa en la que se le preguntó qué haría en caso de que su voto resultase decisivo. Político díscolo El futuro concejal indicó ayer, además, que es bastante "díscolo" a la hora de recibir directrices de su partido y recordó que el compromiso del PA era pactar pueblo por pueblo y ciudad por ciudad, con lo que será la agrupación local la que decida si el futuro alcalde es Díaz Berbel -loque supondría un serio revés a los andalucistas respecto a la imagen de izquierdas- o el socialista José Moratalla. La noche electoral en Granada estuvo cargada de sorpresas. Mientras el PP aguardaba arrollar en la capital y había reservado una gran discoteca para la fiesta final, los socialistas se concentraban escasos en un hotel. A medida que los ordenadores iban escupiendo datos, la euforia iba creciendo entre un número cada vez mayor de militantes. En el PP, entretanto, se posponían las apariciones públicas y se iba aplazando la fiesta. El alcalde en funciones, Gabriel Díaz Berbel, resaltó de los resultados (13 concejales populares, 11 socialistas, 2 de IU y uno del PA) que la ciudad le había encargado la tarea de gobernar, que podría hacerse mediante un pacto con los andalucistas o, incluso, gobernar en minoría. Pero volvió a insistir en que, si no es alcalde, se marchará a casa. Tanto Díaz Berbel como José Moratalla tendrán que poner a prueba ahora su talante negociador para conseguir los apoyos de Izquierda Unida y el Partido Andalucista. Para los socialistas granadinos, ya es casi una realidad que Díaz Berbel no repetirá como alcalde.