Una muestra revisa la obra pictórica de artistas del Bidasoa del siglo XX La exposición reúne 41 piezas en el centro cultural Amaia de Irún

El Centro Cultural Amaia de Irún acoge hasta el próximo 18 de julio Bidasoaldeko Margolariak, una exposición que propone un recorrido por las distintas tendencias pictóricas que han surgido en la comarca a lo largo del presente siglo. La muestra reúne un total de 41 obras de otros tantos artistas que permiten conocer la evolución conceptual de las propuestas. Desde el academicismo de Regoyos, hasta la renovación naturalista de Montes Iturrioz; o la abstracción de Basterretxea, todos cobran protagonismo en la exposición.

La muestra, organizada por el Ayuntamiento de Irún, pone de relieve la pluralidad de tendencias plásticas nacidas en este enclave. No se trata de una aproximación a la denominada Escuela del Bidasoa. "Personalmente no creo que exista", precisa el comisario de la exposición Iñaki Moreno Ruiz de Eguino. "Se dan ciertos movimientos en ciertos momentos". De ahí el planteamiento de la exposición, que pasa por realizar una revisión de dicha realidad a través de la obra de distintos artistas de este siglo. Tienen en común su vinculación con la comarca, bien por el hecho de haber nacido o residido en alguna de las localidades, bien por haberse sentido influenciados por ella. El recorrido discurre por las distintas salas del centro cultural Amaia de Irún, que sirven además de espacio diferenciador de los cinco momentos en los que está estructurado la muestra. El viaje diseñado por Ruiz de Eguino comienza con Patriarcas (entre siglos XIX y XX), un acercamiento al academicismo de algunas de las grandes figuras que ha dado el Bidasoa: Darío Regoyos, José Ignacio Echenagusia, José Solis y Ricardo Baroja, entre otros. La exposición llama a la reflexión en el paso de una sala a la otra, al análisis de distintos lenguajes conceptuales a partir de la observación detenida. No podía faltar Daniel Vázquez Díaz, considerado el gran transformador y pieza clave para la evolución posterior de la pintura entre las generaciones más jóvenes de artistas de la comarca. Su obra se convierte en protagonista de La renovación naturalista y estéticas tradicionalistas, que engloba las propuestas de autores como Gaspar Montes Iturrioz, Bernardino Bienabe, Ignacio Echandi, Juan Larramendi, Menchu Gal, María Carmen García Rementería o Antonio Moreno Bergaretxe. Esta tendencia sirve de contraste a los planteamientos de la Pluralidad de nuevas corrientes figurativas, surgidas tras la influencia foránea de los realismos en las décadas de los 60 y 70, que cada uno adaptó a su sensibilidad artística. Ruiz de Eguino ha situado en estos parámetros a pintores como Ana Marín, quien recientemente expuso su obra en San Sebastián, Jesús Montes, Ana Izura, Carmen Maura, Xabier Soubelet y Juan Carlos Pikabea, entre otros. En la bandera de la abstracción, que amplió los horizontes del subconsciente, surge la obra de Néstor Basterretxea. Y las aportaciones de las últimas generaciones salen a la superficie de las piezas de Xabier Arribas, Iñaki Gracenea o Susana Zaldibar. Ahí acaba el recorrido del academicismo hacia un eclecticismo estético. Todo nacido en la cuna artística del Bidasoa.