El Ayuntamiento limpia las chabolas de Málaga y retrasa su erradicación La Junta y el Consistorio buscarán una solución en una semana
El Ayuntamiento de Málaga descarta ofrecer nuevo suelo a la Junta de Andalucía para construir viviendas para los 200 chabolistas de las zonas de La Misericordia y Los Morenos. El rechazo de los vecinos de Los Prados a que se les ubicase allí ha llevado a la conclusión de que sería mejor distribuir a estas familias en distintas edificios de promoción pública. El coordinador del plan andaluz contra el chabolismo y los responsables municipales buscarán una solución dentro de una semana.
En su convenio de noviembre de 1998 con la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Málaga se comprometió a ofrecer el suelo necesario para la promoción pública de 40 viviendas. Estaba previsto alojar en ellas a las familias que ahora viven en las chabolas de la playa de La Misericordia y el puente de Los Morenos. Pero cuando hace un mes se supo que el terreno cedido estaba entre el ferrocarril y la carretera de Los Prados, los vecinos de la zona protestaron, y el Ayuntamiento desistió de la idea. Esta semana, el coordinador del Plan Andaluz para la Erradicación del Chabolismo vino a Málaga para una reunión con los responsables municipales y las organizaciones no gubernamentales que trabajan en la inserción social de estas familias. Al encuentro no pudo asistir el delegado de Urbanismo, Francisco de la Torre, y el único acuerdo fue que se procediera a la limpieza de basura y escombros en la zona en donde están ubicadas las chabolas. La ausencia de De la Torre provocó una dura polémica entre la Junta y el Ayuntamiento. Ahora, ambas partes tienen pensado volver a reunirse dentro de una semana, para buscar una solución. El ayuntamiento prefiere repartir a estas 40 familias en distintas viviendas de promoción pública que ya existan o en otras que se construyan. Hay un poblado de transición en terrenos municipales, en Los Asperones, en donde se cuentan unas 180 viviendas, pero se pretende adjudicar directamente vivienda a los afectados. En todo caso, el convenio firmado entre la Junta de Andalucía y el municipio ya recoge el capítulo esencial de atención a esta población claramente desfavorecida: el trabajo de integración social, escolarización de los jóvenes y formación profesional para los mayores, que es necesario antes, durante y después de la eliminación de estos poblados de chabolas. Uno de los inconvenientes con los que se encuentran las autoridades es que hay pocos especialistas en esta tarea.