Prodeni afirma que algunas páginas de Internet son "escuelas de pederastia"

La página de Internet que ha llevado a la detención de Francesc de Paula, un periodista y ex educador de colonias veraniegas del Ayuntamiento de Olot (Garrotxa), contenía consejos e informaciones para orientar a los pederastas en su acercamiento a los niños, según fuentes de Prodemi, una asociación de defensa de los derechos del menor. En los textos se incluye una tipología sobre la psicología de los menores más proclives al contacto con adultos, así como los métodos más seguros para abordarlos y los lugares donde encontrarlos.

Prodemi considera que la página web que ha motivado el encarcelamiento de Francesc de Paula, de 49 años, constituye una auténtica "escuela de pederastia", aunque reconoce la escasa correspondencia entre el daño que puede causar la difusión de estas ideas y su posible repercusión penal. El juzgado número uno de Olot decretó, el pasado fin de semana, la prisión incondicional contra Francesc de Paula por delitos contra la intimidad y corrupción de menores. La acusación se sustenta en el material que aparecía en la página web, en una veintena de diapositivas incautadas en su domicilio con menores y adultos desnudos -la mayoría efectuadas en una zona nudista al aire libre- y en unos disquetes informáticos de los cuales el detenido no ha facilitado el código de acceso. La juez le acusa también de un delito de infidelidad en la custodia de documentos, puesto que tenía en su domicilio fichas con los datos y las fotos de carnet de los menores que habían participado en las actividades municipales de verano. En la página de Internet aparecían menores desnudos, pero siempre solos, de espaldas o de perfil. El abogado defensor del ex educador, Lluís Postigo, presentó ayer un recurso contra el auto de prisión alegando que la juez se basa en indicios y sospechas, y que ninguno de los tres delitos ha podido probarse. El letrado afirma que la página web de su cliente contiene textos literarios y que en ningún momento las fantasías que describen se han llevado a la práctica. "Su actuación puede ser moralmente recriminable, pero no jurídicamente", asegura Postigo. El abogado también destaca que, en su trabajo de más de 20 años como monitor, De Paula jamás ha tenido ningún problema. José Luís Calvo, presidente de Prodemi, asociación de defensa de los derechos de los niños, considera que el peligro que entraña la página proviene precisamente de su "enorme vocación didáctica". "El temor no viene del abuso directo, sino de un individuo con enorme experiencia en este campo que está dando una especie de formación por Internet". Fotos y textos Hasta ahora, los mensajes de la red referidos a las inclinaciones sexuales hacia los menores se movían entre "las fotos puras y duras" y los textos dedicados a ofrecer una "justificación o cobertura intelectual" de estas tendencias, explica Calvo. La utilización del idioma español en la web constituye otra de las novedades, puesto que la gran mayoría de estas páginas estaba hasta ahora escrita en inglés. Los investigadores sostienen que el detenido, que mantenía un elevado número de contactos con internautas de todo el mundo, pertenece a un movimiento internacional llamado Boy Lovers, que defiende una forma de pederastia "no agresiva", basada en el engaño y la confianza que se establece con el menor. Prodemi advierte de que esta filosofía, que considera retrógrado, reprimido y conservador a todo aquel que no comulgue con estos principios, se está introduciendo peligrosamente en la red. Los Boy Lovers se refieren a los menores como beneficiarios de los contactos y explican que las relaciones mantenidas con adultos durante su infancia les han enriquecido. El grupo de delitos informáticos del Cuerpo Nacional de Policía empezó a trabajar en la denuncia de Prodemi a primeros de marzo, cuando la asociación les remitió toda la documentación extraída de la red. El camino seguido por los investigadores de Madrid hasta llegar al ordenador de Francesc de Paula, en Riudaura, un pequeño municipio cercano a Olot, no fue fácil. Fuentes de la investigación aseguran que la experiencia informática del autor de la web hizo que éste dificultara el acceso a su domicilio informático con numerosas trampas. Las páginas estaban colgadas en un servidor de Corea que tenía un puente en España. El presidente de Prodemi asegura que los autores de este tipo de mensajes siempre actúan "al borde del delito", y piensa que es difícil que una acusación basada únicamente en la difusión de la página web pueda acarrear penas de prisión.