Feliz aniversario sir Matt Busby

La leyenda del Manchester se agrandó anoche en el Camp Nou. No hay otro club inglés que tenga tanta mística. Es el más rico, su sala de trofeos es la más visitada pese a no ser la más completa y su historia resulta estremecedora para cualquier hincha.Ya en 1902 tuvo que sobreponerse al naufragio de su buque nodriza Newton Head. Old Trafford quedó maltrecho por los bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial y tuvo que acabar jugando en Maine Road, el campo de su rival, el Manchester City. Y un accidente aéreo, ocurrido el 6 de febrero de 1958 en Múnich, destrozó aquel equipo de ensueño, los Busby Babes. Roger Byrne, Geoff Bent, Eddie Colman, Mark Jones, David Pegg, Tommy Taylor, Liam Whelan y unos días más tardes el genial Duncan Edwards murieron en el accidente del Elizabethan cuando no logró levantarse y chocó contra las vallas del aeropuerto, mientras Jackie Blanchflower y Johnny Berry no conseguirían sobreponerse a sus heridas para volver a jugar.

Matt Busby se recuperó y dirigió diez años después, el 29 de mayo de 1968, el histórico equipo que logró la primera y hasta ayer única Copa de Europa para el Manchester. Wembley se estremeció con el juego de aquel grupo capitaneado por Bobby Charlton y tocado por la magia de George Best - Dennis Law no jugó aquella final- que le endosó cuatro goles al Benfica de Eusebio (4-1).

Busby hubiera cumplido ayer precisamente 90 años. De ahí que la gesta del Manchester United en el Camp Nou tuviera como protagonista a sir Matt. "Es increible que lo que ha ocurrido se haya producido el día del cumpleaños de nuestro querido Busby".

Beckham, Giggs, todos los futbolistas del Manchester y, sobre todo Sheringham, brindaron el triunfo a su padre espiritual. Visiblemente emocionado, Bobby Charlton, representante del mítico equipo del 68, aguardó hasta el último momento para expresar su felicidad. Una vez se acabó la fiesta en el vestuario, Bobby Charlton saltó a la cancha y se paseó casi a oscuras por el gol norte del estadio del Camp Nou, recorriendo desde el banderín de córner hasta el primer palo, donde se había gestado el remonte del Manchester, el lugar en que se había producido un hecho sin precedentes, insólito en una final continental.

"Estoy seguro", dijo Alex Ferguson, el entrenador de los diablos rojos, que Bobby Charlton ha pensado lo mismo que yo: ha sido sir Matt quien desde allí arriba estaba empujando la pelota para festejar su aniversario".