La justicia investigará si hay policías que tapan con su silencio al agente que violó a una brasileña

La Sala Segunda de la Audiencia de Bilbao, que absolvió a un policía nacional de violar en agosto de 1995 a la brasileña Rita Margarete G. en un calabozo, pedirá que se abra una investigación judicial para aclarar si hubo agentes que, conociendo los hechos, no actuaron y protegieron al culpable. El Sindicato Unificado de Policía (SUP) y la Unión Federal de Policía apoyan una "investigación rigurosa", aunque ven "difícil" actuar disciplinariamente, dada la sentencia absolutoria. El SPPU entiende que es tarde para investigar y que "la dirección general debió hacerlo antes".

El tribunal juzgó en abril del pasado año a Valentín G. G., de 39 años, acusado de un delito de violación, y a sus dos compañeros José Luis F. R., de 50 años, y Arturo S. P., de 43, como cómplices, al considerar que sólo estos dos últimos, como encargados de los calabozos, podían permitir el acceso a los mismos. Pero, aunque los jueces reconocieron en su resolución la violación de Rita, la falta de pruebas posibilitó que los tres funcionarios de policía fueran absueltos el 10 de junio de 1998. Los tres siguen en activo en el cuerpo, aunque Valentín G. G., destinado en la Brigada de Extranjería, está de baja psiquiátrica, según fuentes sindicales.Rita fue detenida en el curso de una redada efectuada por la policía de madrugada en los clubes Trastevere y Hollywood de Barakaldo, donde se arrestó también a varias personas supuestamente dedicadas a la prostitución. Horas después, un agente obligó a esta mujer a quitarse los pantys y, tras ponerse un preservativo, le dijo que "a las prostitutas lo que les gusta es follar" y la violó vaginalmente.

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, en una sentencia del pasado 23 de abril, falló que "no ha lugar al recurso de casación por quebrantamiento de forma e infracción de ley" interpuesto por Rita, a la vez que condenó a ésta al pago de las costas procesales. Sin embargo, la sentencia "anima" a la Audiencia de Vizcaya a que se dirija al Cuerpo Nacional de Policía para que investigue los hechos "en el campo administrativo y disciplinario" y evitar así que quede impune "un gravísimo delito de violación acreditado y constatado".

La solicitud de que un juez investigue a aquéllos que pudiendo saber algo no colaboraron y silenciaron los hechos se hará después de que se deduzca testimonio de las actuaciones y se remitan al juzgado de guardia correspondiente. La medida afectará a los dos agentes que se sentaron en el banquillo como supuestos cómplices y a otros que puedan resultar de la investigación.

El Tribunal Supremo considera que José Luis F. R. y Arturo S. P. han tenido "necesariamente que conocer y saber con claridad meridiana que el que entró a la hora en que ambos estaban de servicio [en los calabozos] es quien consumó la violación en la indefensa mujer, pero no lo han denunciado". El director general de la Policía, Juan Cotino, ha anunciado la apertura de un expediente para esclarecer responsabilidades. La brigada de Asuntos Internos ya ha sido movilizada.

El Sindicato Unificado de Policía, al que está afiliado el agente Arturo S. P., ve "difícil" actuar ahora por vía administrativa, "dado que no hay sentencia condenatoria". La Unión Federal de Policía sospecha que "en este caso hay un código azul de silencio" contra el que hay que luchar para que el delito no quede impune. El Sindicato Profesional de Policía Uniformada (SPPU), al que está afiliado Valentín G. G., opina que éste es "intocable", ya que ha sido absuelto por la justicia.

La secretaría de migraciones de CC OO considera "intolerable" que los tres policías sigan en el cuerpo y exige su inmediata expulsión. La Unión Sindical Obrera (USO) afirma que "el CNP queda dañado de forma notoria al no sólo cometer el delito, sino además encargarse de proteger al delincuente".

La Audiencia de Bilbao juzgará el 7 de junio a otros dos policías de la comisaría de Indautxu acusados de maltratar a Rita durante su detención y en el posterior interrogatorio en la Jefatura Superior de Policía de Bilbao.