Puntualización

Desearía puntualizar unas alusiones de Eduardo Haro Tecglen, en su crítica a mi obra de teatro Las hermanas de Buffalo Bill, a un supuesto "grupo" de autores, donde, al parecer, estoy yo "y bastantes disgustos me quisierondar". Este grupo donde yo me encontraba, lo que hizo fue dar a la publicidad hace 23 años una respetuosa nota donde se manifestaba un desacuerdo de carácter estético, referente a la línea crítica del señor Tecglen, que a la sazón era asesor del Centro Dramático Nacional. Pues bien, jamás pretendí dar un disgusto a un intelectual tan curtido en todas las lides periodísticas de todos los tiempos como él. Aquello era una opinión sin énfasis ninguno, donde incluso el más perjudicado era yo mismo, teniendo en cuenta que aquella nota en un principio no me contemplaba a mí, y hasta me humillaba tras la polvareda de mi estreno de Las planchadoras, por lo que al ofrecérseme la firma de la desdichada nota, yo incluí la palabra "supuesto" o "supuestas" ya ni recuerdo, para salvar un poco mi obra, que la nota, otra curiosidad, no me defendía, ni mucho menos, sino todo lo contrario. Después he tenido encima que cargar con todos los sambenitos de Haro Tecglen durante décadas. Por favor, señor Haro, olvide aquella nota, que empaña sus críticas de cierto rencor, que ni usted mismo se merece, por el alto aprecio que le tengo, a pesar de sus infantilismos, que no quiero enumerar. Usted ha sido faro luminoso y, por favor, no se haga luz de gas de sí mismo. Yo a usted le quiero y le admiro.-