¿Se encontrará la lápida funeraria?

Otra incógnita. Se sabe que Juan de Alfaro, amigo de Diego Velázquez, redactó el epitafio. Se trata de un texto larguísimo donde se relata la vida del artista.Tan extenso es el epitafio que los historiadores dudan de que cupiese sobre la tumba. Por ello manejan la teoría de que aquel texto en honor del pintor que escribió Juan de Alfaro fuese impreso en un cartel que se colocaría junto al féretro. Acabado el entierro, el epitafio sería retirado. De todas formas, y si esta teoría que manejan algunos historiadores fuese cierta, parece muy poco lógico que no se grabase algún tipo de inscripción sobre el nicho del "primer pintor de cámara de don Felipe IV, augustísimo rey de las Españas, vigilantísimo ayudante de cámara y aposentador mayor del Palacio Real".

¿Se trasladaron los huesos en épocas anteriores? Las iglesias fueron el lugar tradicional de enterramiento durante muchos siglos en España. Pero el rey Carlos III, ante los peligros que para la salud pública suponía el convertir las iglesias en unos grandes cementerios, prohibió esta costumbre.

La Iglesia se resistió a la prohibición real, ya que los entierros eran una de sus principales fuentes de ingresos.

Por esta razón terrenal, las clases pudientes, y que podían pagar el mantenimiento de los panteones, lograron que los cuerpos de sus seres queridos y antepasados siguiesen en los templos, mientras que las clases sociales más humildes no lograron este mismo favor.

Cada cierto tiempo, los responsables de las iglesias llevaban a cabo lo que se conocía como mondas: llevar los cuerpos de los que no pagaban a osarios comunes en las afueras de la ciudad.

Si el pintor Diego Velázquez fue enterrado en el panteón de los Fuensalida, o cerca de ellos, hay posibilidades de que siga bajo la plaza de Ramales. En caso contrario, sus huesos se habrán perdido para siempre como consecuencia de alguna monda de aquella época. Todo son suposiciones. El consejero de Cultura, Gustavo Villapalos, comentó hace unos días: "Lo importante de estas excavaciones es que se va a desenterrar y estudiar una de las iglesias más antiguas de Madrid. Encontrar los huesos de Velázquez quizás sea lo menos importante. Lo que nos ha movido a llevar a cabo estas excavaciones es el hecho de conocer un poco mejor la historia de Madrid. ¿Y por qué no? Resolver uno de los grandes misterios de la ciudad".