El Ejecutivo admite dos intentos de comunicarse con la banda

El Gobierno reconoció ayer que ha intentado dos veces contactar con ETA, a través de intermediarios, para tratar de acreditar la disposición de la banda de pasar de la tregua indefinida al alto el fuego definitivo. La intención del Ejecutivo de comunicar con la organización terrorista fue anunciada por José María Aznar el 3 de noviembre y ratificada en su comunicación de La Moncloa del 18 de diciembre.Las fuentes consultadas aseguran que lo único que ha habido por parte del Gabinete han sido mensajes verbales hacia la banda con esa única intencionalidad y en los que se aclaraba que no se admitiría intermediarios, y menos aún una mediación internacional. No ha habido cartas desde el Ejecutivo. "Nuestra actuación ha sido, está siendo y será transparente", señaló ayer un portavoz gubernamental.

El primer intento del Gobierno de conectar con ETA, por vía indirecta, se produjo a finales de noviembre, a las pocas semanas de que Aznar anunciara por vez primera su disposición a hablar con la banda armada. La respuesta de ETA, según la versión del Ejecutivo, fue que en ese momento no manifestaba interés en establecer un contacto directo con la representación gubernamental que José María Aznar nombró oficialmente e hizo pública: el secretario general de la Presidencia, Javier Zarzalejos; el secretario de Estado de Seguridad, Ricardo Martí Fluxà, y el asesor presidencial Pedro Arriola.

Conversaciones directas

La respuesta de ETA, por carta, según confirman fuentes gubernamentales, se produjo en diciembre, y aunque no apremiaba a una reunión con el Gobierno, tampoco la descartaba en un futuro. Fuentes del Ejecutivo recuerdan que a los pocos días, el 21 de diciembre, ETA hizo público un comunicado en el que oficializó sus posiciones. En dicho comunicado confirmaba que aún no ha había establecido contacto directo con el Gabinete y reafirmaba la tregua indefinida, declarada el 16 de septiembre, y se mostraba dispuesta a abrir conversaciones directas con el Ejecutivo. Era la cara positiva del comunicado.Pero existía otra negativa, a juicio del Gobierno: la exigencia que ETA le hacía de negociar "el reconocimiento de Euskal Herria, de su territorialidad y el derecho a elegir su futuro con libertad". Estas exigencias, inasumibles para el Gobierno, no aparecían en los dos comunicados anteriores de ETA, el del 16 de septiembre y el de finales de octubre. Desde entonces, se congelaron los contactos.

Según revela ETA, recientemente ha habido un segundo intento de establecer contacto por parte del Gabinete. Fuentes oficiales del Ejecutivo no desmienten este segundo intento, cuya filtración causó ayer perplejidad en La Moncloa.