Guipúzcoa abre en Aldakonea un centro de ancianos al "estilo sueco"

La inauguración de Aldakonea, hasta ayer un viejo asilo abandonado y desde hoy una lujosa residencia de ancianos inválidos, representa la apertura de un centro avanzado en la atención a las personas mayores, basado en el modelo sueco. La idea surgió tras girar una visita a este país escandinavo y constatar allí "las nuevas tecnologías en el equipamiento" de las residencias de ancianos, explicó ayer en San Sebastián el diputado de Servicios Sociales, Luis María Bandrés. El edificio de Aldakonea se eleva en lo alto del barrio de Egia y domina todo el centro urbano de la ciudad. La Diputación lo adquirió en 1992 a las Hermanitas de los Pobres, que recibieron 25 millones de pesetas por una construcción de principios de siglo erigida al uso arquitectónico de los asilos. Superado un largo periodo de discusiones sobre el destino final del edificio -se proyectó construir viviendas con siete pisos de altura o gastar 1.000 millones de pesetas en derruir el inmueble y levantar otro nuevo-, la Diputación optó definitivamente por remodelar las actuales instalaciones, que ha costado 397,5 millones de pesetas (2,3 millones de euros). Certificado de calidad La nueva residencia de ancianos de Aldakonea dará cobijo a 138 clientes, de los cuales 30 serán atendidos en el centro de día y el resto permanecerán internos. La reconstrucción ha permitido incorporar a la edificación "aplicaciones innovadoras que se van a constituir en un referente en el sector de la atención a los mayores", manifestó el diputado Bandrés. La empresa que gestionará Aldakonea, la unión Biharko-Lahar, pretende recibir en breve la calificación ISSO de calidad. Las habitaciones tienen servicios higiénicos con inodoros de limpieza automática, los accesos a las plantas y desde el exterior tienen sistemas de apertura sincronizada, los cristales del exterior del edificio refractan los rayos UVA y está dotado con poleas y maquinaria moderna que facilita a los cuidadores maniobrar a los ancianos de movilidad nula. Lo más llamativo es el ambiente colorista de los espacios comunes de cada una de las cinco plantas. Las salas están diferenciadas con colores chillones, elegidos no al capricho, sino fruto de una reflexión: "Se trata de diferenciar los tratamientos de las zonas comunes de las de carácter privado", aseguró la directora de Gizartekintza, María Jesús Aramburu. Aldakonea no estará en funcionamiento hasta dentro de unos 15 días mientras se procederá a seleccionar a los futuros huéspedes, que procederán en su gran mayoría de la comarca de Donostialdea. Con esta residencia, Guipúzcoa oferta casi 3.500 plazas, aunque el departamento de Servicios Sociales quiere aumentar esta cifra teniendo en cuenta el progresivo envejecimiento de la población en esta provincia (17,3% de personas mayores de 65 años), que es el más alto de Europa junto al de Alemania.