Aznar considera "desestabilizador" un Gobierno vasco que incluya a EH

El presidente del Gobierno, José María Aznar, considera "desestabilizador" el pacto, aún no firmado, entre el PNV y Euskal Herritarrok (EH), la marca electoral de Herri Batasuna (HB), para la formación del Ejecutivo vasco. Según manifestó durante la madrugada de ayer en Washington, donde asistía a la cumbre de la OTAN, ese acuerdo no le parece recomendable para una política de estabilidad y respeto institucional.

"Cuando se llega a un pacto de estabilidad parlamentaria", manifestó Aznar, "hay que desear que también lo sea de estabilidad institucional". "Hay algunos", añadió, "que tienen que demostrar con mucha intensidad que van a jugar a la estabilidad parlamentaria y a la estabilidad institucional, pero más bien da la impresión de que se dedican a jugar a la desestabilización total, global, incluida también la desestabilización institucional".

Aznar aludió a su reunión en Washington con el presidente turco, Suleiman Demirel, en la que se abordó la cesión del Parlamento de Vitoria por parte de los nacionalistas vascos a la autodenominada Asamblea kurda en el exilio, que ha sido suspendida cautelarmente por el Tribunal Constitucional.

"El presidente Demirel", dijo, "está muy bien informado de la posición española", por lo que descartó cualquier motivo de preocupación por su parte. "Yo espero", concluyó, "que con la aplicación del sentido común y el respeto al Constitucional se eviten más circunstancias y comentarios".

Ibarretxe, sin "vértigo"

Mientras tanto, al lehendakari, Juan José Ibarretxe, no le da "vértigo" gobernar con EH aunque todavía no haya condenado de manera explícita la violencia. En varias entrevistas publicadas ayer por periódicos vascos, Ibarretxe defiende un acuerdo con la plataforma abertzale que, aunque oficialmente no ha sido firmado, ha funcionado con efectividad matemática en la Cámara de Vitoria. Sin embargo, aclara que tras las elecciones de junio no se extenderá a las diputaciones y los ayuntamientos. Sin aportar fecha para la presentación de los presupuestos de Euskadi o a la creación del nuevo foro de diálogo que postula, Ibarretxe se limita a asegurar: "Vamos a ser capaces entre todos de desterrar la violencia". Asimismo, insiste en que el proceso de paz "debe depender de todos, no del juego de mayorías". Un ejercicio de buena voluntad en el que Ibarretxe critica con dureza el que, "ahora que desaparece la violencia" se caiga "en la tentación de condenar las ideas". "Ha llegado el momento de tomar la iniciativa política y efectuar gestos que resultan ya inaplazables", afirma.

Por su parte, Carlos Garaikoetxea, presidente de EA, aseguró que hay una hipocresía inconcebible en el PP y el PSOE, porque "se obstinan en oponerse a todo". "Basta que se haya dicho que existe una probabilidad de pacto con EH para que se agiten todos los demonios de quienes sienten pánico a que se configure entre los nacionalistas una mayoría democrática, sin violencia y respetuosa de las vías institucionales", agregó.