Gimeno deja en manos del obispado el servicio municipal de orientación familiar de Castellón
"El obispado de Segorbe-Castellón se compromete a asumir íntegramente la gestión del servicio del centro de orientación familiar en Castellón y atender en el mismo a las personas derivadas por el Ayuntamiento". Esta frase, la estipulación segunda de un convenio aprobado por el PP, no da lugar a ninguna duda. Los populares han dejado en manos de la Iglesia toda la gestión del servicio referente a la orientación familiar. Éste, hasta ahora, era asumido por el Ayuntamiento pero, a partir del segundo semestre de este año, lo controlará el obispado.
Para ello el alcalde de la capital de La Plana, José Luis Gimeno, y el obispo de la diócesis, Juan Antonio Reig Pla, firmarán un convenio, que ya ha sido aprobado en una comisión informativa con los votos favorables del PP y en contra de EU y PSPV. En él se determina, además, que el Ayuntamento pagará al obispado entre tres y cuatro millones de pesetas para que adecúe un inmueble que destinará a este fin. El convenio expresa la intención de Reig Pla de inaugurar un centro de orientación familiar gratuito y dirigido "a todas las familias que lo soliciten". Para ello, el obispado ha adquirido "expresamente para esta finalidad" un entresuelo. Según indica el mismo acuerdo, entre los objetivos de este centro se encuentra el "promover de forma integral los valores de la familia de tal forma que favorezcan la estabilidad y el desarrollo armónico de la misma" y el "asesorar y formar a las parejas que deseen contraer matrimonio". Asimismo, su objetivo es "prevenir, informar y formar en los aspectos relacionados con las relaciones interpersonales del matrimonio, la pareja, la familia, y con los aspectos psico-educativos de los hijos". El centro también tiene la intención de "acoger y escuchar a toda persona que desee ser orientada sobre las problemáticas de su ámbito familiar y conyugal". Además, orientará y asesorará "en los diversos problemas" a las parejas y las familias y, según el mismo texto, intervendrá "terapeúticamente en los ámbitos de pareja, de la familia y de los miembros, derivando a los profesionales adecuados, según las diversas situaciones y características de los problemas, crisis, conflictos, rupturas y patologías de los casos presentados". Para todo ello, el obispado habrá de habilitar el centro de referencia y lo hará con el dinero que le pague el Ayuntamiento con el que se adquirirá el "mobiliario, material ofimático, bibliográfico y material fungible" que sea preciso, según indica el convenio. Este acuerdo argumenta la necesidad de dejar el servicio en manos del obispado en dos puntos. Uno de ellos hace referencia al área municipal de Servicios Sociales que "desarrolla intervenciones con familias residentes en Castellón que, por circunstancias adversas requieren de un servicio especializado de asesoramiento y terapia familiar, que venga a mitigar los graves efectos que, en ocasiones, se derivan de situaciones de cirsis y conflicto familiar grave". En otro punto se expone que ambas partes valoran "favorablemente la creación en Castellón de un servicio de estas características", con lo que manifiestan "su voluntad de colaborar y de unir los esfuerzos de las mismas". La coordinadora local de Esquerra Unida, Charo Parra, considera que la firma de este convenio supone "el desvío de dinero público a una institución religiosa, a la que se favorece por la gestión de un servicio público que debería prestar una institución laica como es el Ayuntamiento". Por su parte, el edil socialista Miguel Alcalde apuntó ayer la intención del grupo municipal de presentar una moción para solicitar que, si los servicios municipales actuales no son suficientemente especializados, se destinen los cuatro millones para contratar a personal que pueda cumplir esa función en el servicio del Ayuntamiento.
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