32.000 vecinos votan a favor de construir un hospital en el solar de la cárcel de Carabanchel

El referéndum simbólico convocado ayer por las asociaciones de vecinos para decidir el futuro de la cárcel de Carabanchel acabó con un resultado aplastante. 32.315 vecinos de Latina y Carabanchel Alto votaron contra el proyecto del Ayuntamiento de construir 1.300 pisos privados en los terrenos de la antigua prisión. El 99,83% de los 32.371 vecinos que participaron en la consulta quiere equipamientos sociales en los 172.167 metros cuadrados que ocupa la cárcel. En 1993, una consulta similar sobre la reforma de la plaza de Oriente reunió a 1.500 personas, un número 21 veces inferior al de ayer.

"Éxito rotundo". Así calificaron las asociaciones vecinales y la oposición los resultados que arrojó la jornada de ayer. "Está claramente demostrado que los vecinos quieren que los terrenos de la cárcel se destinen a equipamientos sociales. El alcalde no quiso hacer un referéndum con los medios que tiene el Ayuntamiento y tuvo que ser el movimiento ciudadano el que lo convocara. La respuesta masiva demuestra que la voz del pueblo está por encima de la de Álvarez del Manzano", dijo ayer el concejal de Izquierda Unida Julián Rebollo. La concejal del PSOE, Ruth Porta, se declaró "impresionada" con los resultados dadas las circunstancias en las que se llevó a cabo la consulta ciudadana. "El PP tiene que reflexionar sobre esta jornada. Este es un planteamiento social de grandes dimensiones al que el alcalde debe responder. Tiene que decir qué va a pasar ahora con los terrenos de la cárcel. Debe hacerlo antes de las elecciones", señaló Porta.

El PP es la primera fuerza electoral en los distritos concernidos en la consulta (en Latina obtuvo mayoría absoluta en las municipales de 1995 y en Carabanchel, relativa). "Si no reconsideran su postura es seguro que van a perder estos dos distritos", coincidieron Rebollo y Porta.

Hospitales saturados

El referéndum -meramente simbólico al no contar con el apoyo del Ayuntamiento-, pretendía conocer la opinión de los vecinos de La Latina (270.000 habitantes) y del barrio de Carabanchel Alto (50.000) sobre la decisión municipal de construir pisos privados en los terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel, clausurada el año pasado. De los 172.167 metros cuadrados que ocupa la prisión, 129.000 se destinarán a la construcción de viviendas privadas. "Esto supone un negocio redondo de 35.000 millones para el Ayuntamiento", dijo Julián Rebollo. El concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, del PP, asegura, en cambio, que el Ayuntamiento recibirá "1.300 millones de pesetas reutilizables en los distritos afectados". Pero la oposición afirma que el déficit sanitario de Latina y Carabanchel es elevado: sus habitantes tienen que acudir al hospital Clínico o al Doce de Octubre y no cuentan con un centro propio. "No es justo que tengamos que ir tan lejos para una consulta médica o para una urgencia. Además, esos hospitales están saturados. Lo que queremos es un hospital nuestro, no más casas", señaló un vecino que acudió a la convocatoria de ayer.

Los terrenos de la cárcel para equipamientos sociales: hospital, centro para la tercera edad, o los terrenos de la cárcel para viviendas privadas. Esas eran las dos opciones que tenían los votantes en sus papeletas, que tenían que rellenar con sus datos personales: nombre y DNI. Con un sólo formulario podían votar hasta dos personas.

La consulta popular comenzó a las diez de la mañana y acabó a las nueve de la noche en las 36 mesas que se distribuyeron en los principales centros comerciales y paradas de metro y autobús. Un grupo de aproximadamente 50 personas instalado en la sede de la asociación de vecinos de Aluche participó en el recuento de votos con la supervisión de los presidentes de las asociaciones vecinales y los concejales Julián Rebollo y Ruth Porta.

La consulta popular arrojó 10 votos nulos, un 0,03% del total.Los resultados del referéndum se analizarán en una conferencia de prensa conjunta entre las asociaciones vecinales y la oposición que tendrá lugar mañana en el Ayuntamiento. Tanto el alcalde como los ministros de Interior y Sanidad recibirán un comunicado oficial con los resultados. "Vamos a seguir adelante con ésta iniciativa porque los ciudadanos nos lo piden", señaló Julián Rebollo. En su opinión, la respuesta de ayer, comparada con la de hace seis años -cuando se convocó una consulta popular por las reformas de la plaza de Oriente-, "demuestra que cada vez más los ciudadanos participan en cualquier decisión importante", dijo Rebollo. "Es que estamos cansados de que el alcalde inaugure obras y no escuche a los ciudadanos", agregó.

La concejal Ruth Porta señaló también que durante la convocatoria se presentaron militantes del PP que igualmente mostraron su desacuerdo con la construcción de viviendas. "Y varios militares votaron a favor del hospital", contó.