Conflictos
El margen de maniobra de los mercados financieros es más amplio de lo que la situación internacional permite entrever. El temor a una globalización del conflicto de los Balcanes convive con unas políticas monetarias comprometidas como nunca con un desarrollo sostenido de las economías y con los resultados que obtienen las empresas en ese entorno, y entre unas y otras posiciones se dan un cúmulo de opciones que explican los altibajos de las bolsas.Ayer, las bolsas europeas abrieron bajo el síndrome de la ampliación, al menos en el tiempo, del conflicto de los Balcanes y la situación empeoró cuando el mercado de futuros estadounidense anunciaba una apertura negativa en Nueva York. Este mercado confirmó las expectativas, pero a media sesión se había recuprado y obtenía nuevos máximos históricos, algo que posiblemente tendrá efecto en las bolsas europeas en la sesión de esta mañana. Wall Street cerró con una ganancia final del 1,63% que situó el Dow Jones en 10.339,51 puntos.
La Bolsa de Madrid perdió el 0,37%, 3,29 puntos, aunque en algunos momentos bajaba hasta 9,10 puntos. La contratación en el mercado continuo fue de 910,39 millones de euros, 151.476 millones de pesetas, con la concentración acostumbrada, lo que resta importancia a la supuesta acumulación de riesgos en los valores con mayores inversiones comprometidas en América del Sur.
La caída de los tipos de interés -ajustada a la situación económica- es un tema que compite en importancia con el desarrollo de la guerra, al menos para todos aquellos que sopesan la gravedad de la situación a través de las anotaciones en cuenta.
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