_
_
_
_
_

La disputa por la lista electoral de Granada aumenta la tensión entre los sectores del PP

La imposibilidad de acordar una lista electoral para Granada ha acrecentado la tensión entre los dos sectores del PP que rivalizan desde el último congreso. En la reunión mantenida el miércoles en Sevilla por el alcalde, Gabriel Díaz Berbel, y la dirección provincial y regional del partido, la crispación fue extrema y puso de manifiesto que ninguno está dispuesto a ceder en favor del otro. El alcalde quiere una lista con militantes de su plena confianza y se niega a que le acompañen personas con las que mantiene abiertas discrepancias, entre ellas el presidente, Juan de Dios Martínez Soriano.

Más información
Un saludo frío a las puertas de una sala rociera

"Así empezó el hundimiento de UCD", comentó ayer con pesimismo un cargo institucional del partido. Díaz Berbel, con aspecto cansado, declinó ayer por la mañana hacer algún tipo de comentario sobre lo sucedido pero no pudo eludir gestos de contrariedad e irritación. Martínez Soriano, en apariencia más relajado, compareció ante los informadores junto con el portavoz del grupo Popular en el Parlamento andaluz, Antonio Sanz, pero fue igual de hermético: "Hemos adquirido el compromiso de no hacer ningún comentario hasta que la lista no esté cerrada. El alcalde es el candidato oficial del partido". Martínez Soriano trató incluso de restar importancia al encuentro de la noche anterior y aseguró que se trató de una "reunión de trabajo como tantas otras que tendremos". En ella, agregó, se empezaron "a perfilar las futuras listas, no sólo la de Granada". Antonio Sanz, por su lado, trató también de mitigar una tensión evidente: "Para Granada lo conveniente es que nos dediquemos a trabajar en nuestras responsabilidades". Las palabras de ambos contrastan con el verdadero estado de ánimo que hay en el partido, donde además todos están obligados a trabajar contra el reloj.La presidenta del PP andaluz, Teófila Martínez, tiene intención de convocar una nueva reunión para la semana que viene con Díaz Berbel y Martínez Soriano. Comité de Listas A pesar de la intransigencia de los dos sectores enfrentados, la lista tiene que estar elaborada para el 20 de abril. El Comité Nacional de Listas comienza el próximo día 15 una serie de reuniones para conocer las candidaturas del partido. Dada la situación de Granada, el comité esperaría a tener en su poder la candidatura hasta el último día, el 20 de abril. En cualquier caso, el 10 de mayo todas deben estar aprobadas según marcan los estatutos. En caso de que Granada no propusiera la suya por falta de acuerdo, le correspondería elaborarla al citado comité. Esta solución diplomática no es descartada por nadie en las circunstancias actuales. Díaz Berbel ha comentado en anteriores ocasiones que no quiere tener enemigos declarados trabajando codo con codo en el Ayuntamiento, si es que gana las elecciones. La presencia de personas como el presidente provincial, el vicepresidente, Luis Gerardo García Royo, o el diputado autonómico Juan Santaella -que también asistió a la conferencia informativa conjunta de Sanz y Martínez Soriano- es interpretada por el alcalde como una forma de controlar su trabajo o incluso como una maniobra para relegarlo a funciones de representación institucional. La amenaza de Díaz Berbel de abandonar la cabeza de la lista si finalmente son incluidos algunas de las personas citadas ha provocado conmoción dentro del PP, sobre todo en determinadas localidades de la provincia donde el enfrentamiento está a flor de piel. "Están esperando a ver qué hace Berbel para actuar", comentaron fuentes del partido. Sin embargo, los colaboradores más veteranos del alcalde están convencidos de que si bien Berbel jugará sus cartas hasta el final, en ningún caso llevará a cabo su amenaza y al final se presentará en cualquier circunstancia. Debido al momento en que ha estallado el conflicto más o menos larvado que arrastra el PP desde su último congreso, a menos de dos meses del inicio de la campaña electoral, parece inevitable que se produzca un acuerdo de última hora que si bien serviría para dar una apariencia de serenidad mantendría frescas durante otros cuatro años las heridas entre los dos bandos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_