'Los Clinton', crónica de una historia llena de escándalos y ambición
Bill y Hillary Clinton son más que un matrimonio. Son una empresa política que ha invertido todas sus acciones en el proyecto presidencial de Estados Unidos. Un proyecto sometido a las máximas fluctuaciones, pero que al final se mantiene incombustible.Los Clinton son los actores de un culebrón con la Casa Blanca como plató televisivo y cuyos argumentos serían motivo de premios Emmy para sus guionistas.
De las peripecias vitales y profesionales de este famoso matrimonio norteamericano trata la serie documental de tres episodios de una hora de duración cada uno que hoy (a las 15.37) estrena Canal +. Producida en 1998 por Mentorn Barraclough para la cadena británica Channel 4, Los Clinton hace un detallado retrato de una pareja que ha conseguido mantener una sutil copresidencia en el poderoso Gobierno de Estados Unidos.
De Arkansas al caso Lewinsky, Los Clinton sigue la agitada trayectoria de sus protagonistas. El documental cuenta cómo Bill y Hillary saltaron entusiasmados a la escena política desde el Partido Demócrata llenos de ideales de cambio social, como reformar el sistema educativo estadounidense o -con el decidido patrocinio de la abogada Hillary Rodham Clinton- lograr que la salud pública se convirtiera en algo asequible para el bolsillo de los ciudadanos. También señala el programa cómo esos planes iniciales no han seguido la línea esperada y cómo las contradicciones, las acusaciones de abuso de poder y los escándalos sexuales han sido pesadas piedras donde los Clinton (sobre todo él) han tropezado.
La serie construye su crónica televisiva con abundante material gráfico y las informaciones de lasfuentes más cercanas a los protagonistas: consejeros del presidente en sus dos mandatos, ayudantes, secretarios, abogados (también los de Monica Lewinsky) y periodistas de diferentes medios (ABC News, Newsweek, Washington Post...).
Ascenso al poder, primera entrega de Los Clinton, refleja ya la fuerza de Hillary y las debilidades de Bill, cuando en 1992 los rumores sobre escarceos amorosos salpicaban sus pretensiones de trascender más allá de la gobernación de Arkansas. Eran las primeras manchas en su aspiración a figurar ante la opinión pública estadounidense y mundial como un líder intachable.
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