Israel prohíbe a un ministro palestino entrar en Jerusalén

Israel prohibió ayer la entrada en Jerusalén a Ziad abu Zayad, ministro sin cartera de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, según informó la Comisión Ministerial israelí para Asuntos de Jerusalén.La citada comisión también limitó la libertad de movimientos del gobernador para Jerusalén nombrado por la ANP, Yamil Otmán. Aunque las razones para estas medidas no han sido especificadas, se enmarcan dentro de la política del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de reforzar la soberanía de su país sobre la ciudad, especialmente de su sector Este, ocupado por Israel desde 1967.

Desde hace varias semanas, Netanyahu ha emprendido una campaña para reforzar esa soberanía, lo que le ha llevado a un enfrentamiento verbal con los dirigentes palestinos y con la Unión Europea, que, al igual que el resto de la comunidad internacional, no reconoce la autoridad de Israel sobre la Ciudad Santa.

Tras conocer la decisión israelí, el representante de la ANP en Jerusalén, Faisal Huseini, recordó que "está prohibido restringir o limitar la libertad de movimientos de dirigentes palestinos en Jerusalén, según los acuerdos de paz".

Desde 1967, Israel comenzó una anexión de hecho de Jerusalén, considerada como un caso aparte en el Plan de Partición de Palestina de 1947 y que debía quedar como una ciudad bajo administración internacional. La anexión se culminó en 1980, cuando el Parlamento israelí declaró la Ciudad Santa "capital eterna e indivisible" del Estado de Israel.

Tras la conquista del sector este, los sucesivos Gobiernos israelíes fomentaron allí la implantación de colonias judías. Las construcciones civiles en territorios ocupados están prohibidas por las leyes internacionales, como las Convenciones de Ginebra. Además, las autoridades israelíes impiden el retorno de los palestinos nacidos en Jerusalén que se marchan durante un periodo de unos seis meses; a su regreso son expulsados hacia territorios de Cisjordania, lo que es considerado por los dirigentes palestinos como un caso de "limpieza étnica".