ORGULLOSA, REPITE

La ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, no ocultó su alegría en Segovia al ser recordada por varios antiguos alumnos a los que dio clase de Derecho Civil en el Colegio Universitario de esta capital, como el hostelero Cándido López Cuerdo, nieto del que fuera mesonero mayor de Castilla, un título que había refrendado el rey Juan Carlos. Nada más llegar al restaurante, Cándido le dijo a la ministra que tenía un gran recuerdo de las amenas clases que impartía, y la concibió como una gran comunicadora. Feliz, la ministra, acostumbrada ahora a las tensiones de su departamento, donde los altos cargos le duran muy poco tiempo, puso a su ex alumno como modelo de empresario que está siendo capaz de mantener a buena altura el negocio familiar. Fue tanta la satisfacción recibida, pues otra ex alumna, al enterarse de su presencia, también quiso saludarla, que Isabel Tocino volvió al establecimiento el domingo pasado, pero en visita privada, junto con su esposo y sus hijos. Entretanto, la otra cara de la moneda la habían protagonizado horas antes varias decenas de manifestantes de la Plataforma en Defensa de la Sierra de Segovia, que lanzaron gritos contra la ministra por los proyectos de construcción de las autopistas que unirán Ávila y Segovia con la N-VI (Madrid-A Coruña), que, en su opinión, suponen una grave agresión medioambiental al entorno del Guadarrama.-