El PSOE propone que el Senado desaparezca como Cámara legislativa y se convierta en territorial
![Anabel Díez](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F6a03a8da-a77f-4658-abe7-524da5d9d3a4.png?auth=3852c5380b3aef50545c6c0ffd184b9a56111a1fc7d417bb484bd779ae62222b&width=100&height=100&smart=true)
El PSOE ha decidido hacer su propuesta más arriesgada en los 20 años de la Constitución: que el Senado deje de ser una Cámara legislativa, o de segunda lectura de las leyes, y se convierta exclusivamente en territorial, con lo que quedaría al margen de las elecciones al nutrirse de representantes gubernamentales y ministros o consejeros de las distintas comunidades. Ello requeriría, pues, cambios constitucionales y electorales.Así figura en el Manifiesto para las elecciones del 13 de junio que el lunes estudiará la comisión ejecutiva federal socialista y en el que se trata de equilibrar la diversidad de España y el respeto a los hechos diferenciales con la defensa de un proyecto común.
El texto ha sido consensuado entre todos los líderes regionales del PSOE y Nueva Izquierda -irán en coalición a estos comicios- a instancias del responsable autonómico del partido, Ramón Jáuregui, después de media docena de borradores salpicados de numerosas enmiendas: unas, para quitar "el sustrato castellano"; otras, para reivindicar "el prestigio del proyecto estatal".
"Necesidad imperiosa"
Las medias tintas no han servido para dar un empuje al Senado como Cámara territorial, por lo que su única función sigue siendo la de legislar, junto al Congreso, además de elaborar informes sectoriales, los cuales han tenido siempre el reconocimiento de los colectivos implicados."Por desgracia ni el PP ni los nacionalistas se han tomado en serio una reforma del Senado cuya necesidad es imperiosa para evitar el bilateralismo excesivo de la política autonómica y garantizar la participación de las autonomías en la política española; los socialistas pensamos que ésta es la tarea más urgente e importante de la política territorial española", se dice en la página 13 del documento.
"Para garantizar estos objetivos hay que convertir el Senado en una auténtica Cámara de las Autonomías o Consejo de las Comunidades Autónomas. La presencia de los Gobiernos autonómicos asegura la representación territorial y aseguraría el acuerdo con el Gobierno del Estado en la planificación de los grandes planes de infraestructuras, la participación en la Unión Europea y los criterios de reparto de los fondos europeos", se explica. La traducción que hacen distintos líderes regionales es la de que, al final del proceso, el Senado estará compuesto en exclusiva "por los ministros de las regiones federales".
Los autores, es decir Jáuregui y los barones territoriales, reconocen la trascendencia de su propuesta, que llevarán tanto al resto de los grupos como en su programa electoral general, por lo que se comprometen a acometer esta gran reforma de manera gradual.
Uno de los redactores recuerda que, de entrada, supondría "la desaparición de 250 senadores elegidos por sufragio universal". "En aras del consenso y la búsqueda de una solución urgente, aceptamos negociar con las demás fuerzas una idea inicial de todos: la elección de la mitad de los senadores por las asambleas autonómicas y la otra mitad por los ciudadanos en las elecciones autonómicas".
Los socialistas plantean también la creación de la Conferencia de Presidentes, formada por el jefe del Ejecutivo y los de las comunidades, "como cúspide de los órganos de coordinación". "Este órgano, que funciona en Alemania y Austria, es un foro de consulta mutua, orientación y planificación de las grandes políticas para el conjunto del país y sirven también para defender los intereses de las comunidades ante las políticas globales", exponen.
Muchas son las variaciones del texto desde que Jáuregui lo acometió hace casi dos meses. El primero levantó las protestas de los socialistas catalanes, valencianos, gallegos y canarios por "un predominio del sustrato castellano". El actual ya no, aunque el primer secretario de los catalanes, Narcís Serra, ha estado enmendándolo hasta el lunes, cuando el acuerdo parecía total. El de los extremeños, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha sido otro de los enmendantes más activos.
Los que ponen el énfasis en el respeto a la diferencia de las comunidades aseguran que no tienen el mismo modelo que los nacionalistas. Los defensores de un proyecto común, que nada tienen que ver con el nacionalismo español.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
![Anabel Díez](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F6a03a8da-a77f-4658-abe7-524da5d9d3a4.png?auth=3852c5380b3aef50545c6c0ffd184b9a56111a1fc7d417bb484bd779ae62222b&width=100&height=100&smart=true)