Una enferma australiana pide la eutanasia en un anuncio televisivo
El mensaje se emitirá de noche y con una advertencia para padres
La televisión australiana emitirá mañana un anuncio en el que una mujer de 59 años, que sufre un cáncer terminal de vejiga, exige su derecho a terminar con su vida. La grabación ha sido autorizada por las autoridades y las televisiones, quienes consideraron que "se trata de un anuncio político, que quiere cambiar la ley sin hacer apología del suicidio". En Australia, la eutanasia es ilegal.
La mujer se llama June Burns y tiene cuatro hijos. En el anuncio, explica que las tres dosis de morfina que recibe cada día no consiguen aliviar su dolor. Sentada en la cama de su casa del estado de Queensland, la mujer asegura que "si fuera un perro, las autoridades de Protección de Animales ya habrían ido a por mi marido, acusándolo de tratamiento cruel. Y a mí me hubieran sacrificado. A los humanos se les trata mucho peor que a los animales". Al final del spot, cuenta los motivos de su decisión: "Creo que la vida es preciosa. He disfrutado cada momento y desearía poder continuar así, pero no puedo: quiero morir con dignidad".El anuncio ha recibido una calificación especial para su emisión: es decir, los niños deberán verlo acompañados de un adulto, y no podrá ser emitido antes de las 7.30 de la tarde. La entidad que agrupa a las televisiones australianas (FACTS) aseguró ayer, a través de un portavoz, que el mensaje fue aprobado porque "no hace apología del suicidio ni de la muerte asistida". "Es claramente un anuncio político, un intento por reformar la ley más que un testimonio de lo que ella desea hacer con su vida. No incumple ninguna ley federal", aseguró el portavoz.
Sin embargo, como el anuncio tiene un contenido político -el sábado 27 habrá elecciones en el estado de New South Wales, y la eutanasia es uno de los ejes de la campaña-, las autoridades han obligado a los productores a conseguir el auspicio de la Sociedad Australiana para la Eutanasia Voluntaria. "Hay demasiadas emociones en juego y estamos cerca de de unas elecciones fundamentales. Por eso creímos que sería importante que tuviera la aprobación de Eutanasia Voluntaria".
En contra
Los grupos contrarios a la eutanasia se oponen a la emisión del vídeo. Argumentan que podría promocionar los suicidios, "no sólo de los enfermos terminales", y hasta dudan de la salud mental de June Burns. "La realidad es que cuando se abre la eutanasia para uno, se abre para todos", dijo ayer Greg Smith, presidente de la Asociación Derecho a la Vida del estado de New South Wales, donde primero se emitirá el anuncio.
En 1996, el Territorio del Norte de Australia aprobó la primera ley de eutanasia voluntaria del mundo. Cuatro pacientes fueron autorizados a quitarse la vida antes de que el Gobierno central australiano declarara nula la ley ocho meses más tarde. El Gobierno federal tiene jurisdicción directa sobre los dos territorios que componen Australia, pero no sobre los otros seis estados, que pueden decidir por sí mismos sobre la regulación de la eutanasia.
El ministro australiano de Salud, Michael Wooldridge, volvió a rechazar una eventual aprobación de la ley, pero aseguró que es un tema que cada estado debe decidir. "No creo que los Gobiernos deban regular la muerte de sus ciudadanos", declaró.
En España, la eutanasia también es ilegal -está tipificada como delito en el Código Penal-, y las comunidades no tienen competencia para aprobarla por sí mismas. El tetrapléjico Ramón Sampedro, que durante décadas había pedido a las autoridades su derecho a morir, se suicidó el año pasado bebiendo cianuro mientras era grabado por una cámara de vídeo. La cinta fue emitida por todas las cadenas de televisión.
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