Musical de imitación

Broadguay! De Manuel Ochoa y Juan Luis Mira, por Jácara Teatro. Intérpretes: Gloria Sirvent. Pedro del Rey, Mila García, José A. García, Inma Ortega, Carmen Baldas. Arreglos musicales: Germán Rodríguez. Vestuario y escenografía: Joan Miquel Reig y la compañía. Coreografía: Pedro del Rey, Inma Ortega. Dirección: Manuel Ochoa y Juan Luis Mira. Teatro Talía. Valencia, 10 de marzo.Este montaje, ya muy rodado, cierra una trilogía de Jácara Teatro en torno a la comedia musical. El espectáculo plantea más preguntas de las que responde. Uno puede interrogarse por el sentido de un montaje compuesto de refritos de éxito tomados de Grease, Catz, Nuns, La tienda de los horrores o El mago de Oz, salvo que se proponga a un público festivo de fin de curso. La trama inventada (unos infelices se fugan de un manicomio para dedicarse a la terapia musical que les administraban) tampoco es un prodigio de imaginación, y si observamos que no queda bien resuelta, los interrogantes se multiplican. No abundaré en ellos, pero sí sugeriré que buena parte del teatro valenciano tiene una sorprendente buena opinión sobre sí mismo, no sé si debido a que prefiere ignorar que hace por lo común un teatro imitativo de trabajos de más fuste, y que hacerle el caldo gordo sólo lleva a perpetuar una situación muy próxima a resultar insostenible. Véase la crítica de Haro Tecglen al estreno madrileño de Carles Alberola y se entenderá algo de lo que digo sin alegría desde hace ya algún tiempo. Se me dirá que no todo es negativo en el montaje de Jácara, pero tras cierto tiempo en el oficio resulta imprescindible forzar el nivel de autoexigencia si se quiere algo distinto a la complacencia inmotivada. Por lo demás, supongo que en Alicante sobran motivos para un musical. Pero harían falta compositores, cantantes, coreógrafos y directores de escena. No siendo así, no veo nada que celebrar. Esto no es New York, pero tampoco -aún- Villarriba de Abajo.