Kvaerner negocia con el grupo alemán Ferrostahl la venta de su participación en Prerreducidos Vizcaya

VIENE DE LA PÁGINA 1 El Consejo de Administración de Mecánica de la Peña ha inyectado fondos mediante la emisión de deuda subordinada (la última que cobra en caso de liquidación de la compañía y que computa como fondos propios). Mecapeña entró en pérdidas el pasado ejercicio, después de nueve años en beneficios, por culpa de un proyecto de central térmica en Patache (Chile) de 20.000 millones de pesetas. En este negocio iba de la mano de la firma Foster Wheeler y de General Electric y los números se desviaron mucho más de lo esperado. La inyección de fondos por parte de Kvaerner, que cuenta con el 55% del capital, cierra el compromiso de la multinacional, que a su vez atraviesa serios problemas económicos, con el fabricante de bienes de equipo vasco. Kvaerner era hasta hace unos meses el candidato del Gobierno vasco y la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) para hacerse con el control de Babcock & Wilcox. Hoy sus opciones de participar en la privatización se van diluyendo y es la firma estadounidense MacDermott la que se encuentra mejor situada en la carrera por la privatización. El comité de empresa de Babcock & Wilcox ya ha manifestado que la retirada de Kvaerner, aún sin confirmar, "estaba cantada". Este mismo asunto ha llevado a Izquierda Unida a pedir una comparecencia del consejero de Industria, Josu Jon Imaz, en el Parlamento. Lo que sí es cierto es que Kvaerner, impulsor de Prerreducidos Vizcaya, está negociando la venta de su participación en la sociedad, un 20%, a la firma alemana Ferrostahl. El proyecto, de acuerdo con el resto de sus socios, sigue en marcha y tiene todas las posibilidades de salir adelante. El proyecto, que fue promovido por el Gobierno, la Diputación de Vizcaya y Mecánica de la Peña, supone una inversión en dos fases en la Margen Izquierda del Nervión de cerca de 309,52 millones de euros (51.500 millones de pesetas). Esta planta está destinada a los 12 productores de acero que existen en 200 kilómetros a la redonda y que suponen la mayor concentración mundial de consumidores de prerreducidos (materia básica junto a la chatarra para fabricar acero). El gran inversor es el fondo estadounidense Safeguard International.