El PSOE veta a Fernández-Miranda como portavoz de la Mesa del Congreso

La lucha política ha llegado también a la Mesa del Congreso, órgano de dirección de la Cámara. Desde hace un mes, socialistas e Izquierda Unida bloquean la elección de un portavoz que sustituya a Josep López de Lerma, que lo ha sido tres años y que ha pasado de la vicepresidencia segunda de la Cámara baja a la portavocía de CiU. El PSOE reconoce que ha vetado y vetará a Enrique Fernández-Miranda, vicepresidente primero, como portavoz de la institución por su "marcado perfil político, al ser miembro de la ejecutiva del PP".

En la anterior legislatura, el PP actuó de igual forma con el PSOE, que nada pudo hacer por tener un portavoz de sus filas al no lograr la mayoría. Los grupos de oposición constatan que el presidente del Congreso, Federico Trillo, está posponiendo someter a votación la propuesta en favor de Fernández-Miranda con el argumento de que no quiere forzar que sea elegido por mayoría, sino que desea la unanimidad, como ocurrió con López de Lerma.Joan Marcet, vicepresidente tercero de la Mesa (PSC) y Pedro Antonio Ríos (IU) afirman que es imposible el consenso en una situación de falta de mayoría, ya que nunca votarán a un representante del Partido Popular "y menos a Fernández-Miranda que tiene un perfil escasamente institucional, ya que es el representante de la Mesa con más impronta del PP", opina Marcet. Éste precisa que "no hay nada personal que reprochar" al vicepresidente primero del Congreso, nombrado responsable de Formación en el último congreso del PP. Los otros miembros de la Mesa no ocupan puestos de responsabilidad en sus respectivos partidos.

Hace un mes, López de Lerma se despidió de sus compañeros de la Mesa, de la que era portavoz ante todos los foros por decisión unánime de ese órgano, al ser nombrado portavoz parlamentario de CIU en sustitución de Joaquim Molins que abandona esa tarea para dedicarse a luchar por la alcaldía de Barcelona. A López de Lerma le sustituyó en la vicepresidencia tercera su compañero de filas Ramón Companys. A la oposición se le transmitió oficiosamente el interés del grupo de la mayoría de que la voz de la Mesa debía ser Fernández-Miranda.

En la reunión de la Mesa del 16 de febrero, el secretario general del Congreso, Emilio Recoder, suscitó la necesidad de nombrar a un nuevo portavoz. Trillo respondió que podría "avocar para sí tal función pero delegando su ejercicio en función de las necesidades de la Mesa, en sus distintos miembros, proponiendo que se inicie con Enrique Fernández-Miranda", según asistentes a la reunión.

Marcet entiende que la portavocía corresponde al presidente y la delegación sólo correspondería hacerla para "algún asunto concreto". Ríos señaló que esta función debe permitir "la proyección externa del cáracter plural de la Mesa". Fernández-Miranda precisó que la delegación del presidente es sólo de "carácter temporal", pero que resulta necesario designar a un portavoz. Trillo decidió posponer el asunto en busca del consenso. Pero el consenso a favor de un miembro del PP, según Marcet, no será posible.