Esperanza para Nigeria

Olusegun Obasanjo fue dictador militar en Nigeria en otros tiempos. Pero ahora, elegido presidente en las elecciones libres celebradas la semana pasada, ofrece la esperanza de que la democracia eche raíces después de 15 años de brutal e ineficaz poder militar. (...) Si no puede ganarse la confianza de todas la facciones, su turno de gobierno civil seguirá el camino de otros interludios entre dictaduras.A causa de la corrupción y del abuso de poder de una serie de líderes militares, no es fácil que la confianza se asiente en Nigeria. (...) Obasanjo despierta sospechas porque es un general retirado y algunos de sus oponentes lo ven como un peón del Ejército. Sus seguidores argumentan que hace 20 años, cuando era presidente, devolvió el poder a los civiles. Aquella vuelta a la democracia no duró mucho y los generales volvieron al poder. El mismo Obasanjo criticó el poder militar y terminó como prisionero político del general Sani Abacha. (...)

El nuevo presidente es un cristiano del suroeste y miembro de la etnia yoruba. Sin embargo, otros yoruba cuestionan su lealtad y temen que se haya vendido al más poderoso norte, dominado por los musulmanes. Sus más amargos detractores critican su ley de 1979 que daba todos los derechos del petróleo al Gobierno. (...) El hambre y la pobreza están incontroladas en Nigeria. La economía está hecha un guiñapo y las infraestructuras han sido gravemente dañadas por la negligencia de los políticos. Éstos son los desafíos a los que Obasanjo tiene que hacer frente para que Nigeria rompa definitivamente con el poder militar.

, 2 de marzo