Con el corazón
Disciplina y equilibrio.
Con la presencia de Redondo, ocupado en labores defensivas, y Guti, en misiones más ofensivas, ha llegado equilibrio necesario. La disciplina la hemos observado con Seedorf jugando en la banda derecha y Roberto Carlos preocupado en labores defensivas, dando lugar a la sorpresa con sus escasas incorporaciones.
Mejor capacidad física de los ucranios.
El desgaste realizado por los jugadores del Real Madrid durante el primer tiempo, acompañado por el golpe psicológico que representó el gol de Shevchenko, ha dejado en evidencia la diferencia física existente en los dos equipos. El Real Madrid ha tenido que jugar con el corazón, llegando a los límites en numerosas jugadas.
Shevchenko.
El jugador ucranio ha dado muestra de su verdadera categoría. Combina velocidad y habilidad, cualidades muy difíciles de compaginar. Además, su capacidad para finalizar con un excelente golpeo es una de sus virtudes no habitual en un jugador joven. Dentro del sistema de juego, el Dinamo juega con total libertad, lo que todavía le hace más imprevisible. El Milan ha fichado a un jugador que puede decir muchas cosas en la próxima década.
Falta de precisión del Real Madrid.
El Real Madrid, con la movilidad de Morientes, la creatividad e improvisación de Mijatovic, Seedorf y Raúl ha provocado numerosas jugadas de peligro que no ha podido materializar en el primer tiempo. Si el Real Madrid hubiera podido mantener el mismo ritmo durante el segundo tiempo, seguramente sus jugadores hubieran acertado, sobre todo por el desequilibrio en la disciplinada defensa del equipo ucranio.
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