Gil pide ahora diálogo a la Junta con "la voluntad sincera" de cumplir sus exigencias urbanísticas

El alcalde de Marbella, Jésús Gil, parece haber dado fin a la guerra que unilateralmente declaró a la Junta el pasado verano. En una carta remitida al consejero de Obras Públicas, Francisco Vallejo, el Ayuntamiento ha pedido el inicio de una etapa de diálogo y colaboración entre ambos para desbloquear la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Gil no sólo está dispuesto ya a elaborar el texto refundido al que le obliga la ley y al que siempre se ha negado, sino que confiesa tener la "voluntad sincera" de atender las exigencias de Obras Públicas.

La carta, enviada también a la directora general de Ordenación del Territorio y Urbanismo, Josefina Cruz, y al delegado de la Consejería de Obras Públicas en Málaga, Carlos Morales, confirma el intento de acercamiento a la Junta que Gil inició tras su salida de prisión el pasado 15 de enero. Los siete días que Gil permaneció en la cárcel por su implicación en el supuesto desvío de 450 millones de pesetas del Ayuntamiento al Atlético de Madrid marcaron un punto de inflexión en su estrategia política. Presumiblemente por sugerencia de su nuevo abogado defensor, Horacio Oliva, y de su hijo Jesús, alcalde de Estepona, que ha asumido el liderazgo del Grupo Independiente Liberal (GIL), Gil y Gil está dispuesto ahora a elaborar el texto refundido al que está obligado desde que la Comisión Provincial de Urbanismo de Málaga rechazara el pasado julio el documento de revisión del PGOU. Gil, que había cuestionado la autoridad de la Junta, se había venido negando a elaborar el texto refundido. Gestos Primero Gil retiró los carteles contra la Junta que hizo instalar en la carretera y después desistió de las querellas presentadas contra los miembros de la comisión de urbanismo y la directora general. Ahora, la carta enviada el pasado 17 de febrero y firmada por el alcalde accidental, Julián Muñoz, contiene una petición formal de reiniciar las relaciones institucionales con la Administración autonómica. En el escrito, el Ayuntamiento de Marbella asegura que "está estudiando" los contenidos del acuerdo de la comisión de urbanismo y de la resolución del consejero que rechazaron el PGOU. Y agrega: "Este estudio se está realizando con la voluntad sincera de llegar a incorporar al documento la revisión del PGOU aquellas observaciones de la Consejería de Obras Públicas y Transportes que sean exigibles desde la legalidad vigente, conjuntamente con las mejoras, fundamentación y motivación de algunas determinaciones y la subsanación de las deficiencias o contradicciones detectadas". El propio Ayuntamiento entiende que es una labor compleja, por lo que considera aconsejable "un ejercicio de prudencia para evitar presentar de forma apresurada un texto refundido". En el escrito se pide a la consejería que se inicie un proceso de "diálogo directo" para coordinar con los técnicos la redacción del texto refundido. Gil quiere que esta relación se establezca no solo con la delegación provincial de Málaga, sino con "todos los órganos de la consejería" a fin de "no reproducir las disfuncionalidades detectadas hasta le fecha". La Consejería de Obras Públicas, que esperaba una comunicación formal de Gil sobre su nueva disposición, tiene ahora que dar una respuesta. Según varios cargos consultados, la consejería está dispuesta "a prestar toda la colaboración posible como hace con todos los ayuntamientos", pero entienden que las reuniones técnicas no se debían celebrar hasta que el Ayuntamiento de Marbella presente un documento y evitar así encuentros "sin contenido concreto" que podrían ser instrumentalizados por Gil. La consejería, según su delegado en Málaga, Carlos Morales, "presta asesoramiento, pero no negocia". En la carta remitida a la Junta, el Ayuntamiento de Marbella deja constancia que es "el primer interesado en poder contar con un planeamiento general revisado y vigente", aunque advierte también que debe responder "básicamente" al ya aprobado por el consistorio, con lo que no se aventura fácil el acuerdo con la Junta. De otro lado, el diario Sur publicó ayer una encuesta elaborada por Sigma Dos según la cual Jesús Gil mantendrá la mayoría absoluta en Marbella sin dificultades en las próximas elecciones municipales. PSOE y PP cuestionaron ayer estos resultados y advirtieron que la percepción que tienen por el contacto con los ciudadanos es otra. La encuesta también otorga mayoría absoluta a Celia Villalobos en Málaga.