Un centenar de muertos en Indonesia en choques entre musulmanes y cristianos
Al menos 94 personas han muerto en dos semanas de enfrentamientos entre cristianos y musulmanes en la isla indonesia de Ambón, en el este del país, según comunicó ayer el ministro de Información, Yunus Yosfiah. Las autoridades esperan que la cifra final sea más alta, pues todavía quedan por remover los restos de centenares de casas, tiendas, iglesias y mezquitas atacadas. Los enfrentamientos -que han producido también 20.000 refugiados en la capital de las islas de las especias, convertida en una ciudad fantasma- son fruto de la tensión étnica, religiosa y política que vive el archipiélago, acicateada por elementos no identificados que buscan incrementar la inestabilidad del país, el cuarto más poblado del mundo y el primero en número de musulmanes.
El diario Kompas, el más prestigioso de Indonesia, informaba ayer que unos 200 provocadores han llegado a la ciudad de Medán, la segunda del país, para crear enfrentamientos religiosos. "Tienen planes de convertir el norte de Sumatra en un segundo Ambón", dice el vicegobernador, que ha pedido a los residentes que monten grupos de vigilancia para disuadir a los revoltosos. En otras partes del país, cristianos y musulmanes han erigido barricadas para defender iglesias y mezquitas.
En Timor Oriental, los planes del Gobierno de Yakarta de conceder en el futuro la independencia al territorio invadido en 1975 han acentuado las diferencias entre independentistas e integracionistas, con acusaciones mutuas y llamamientos de unos y otros a las armas. Indonesios no timorenses están empezando a abandonar la provincia ante la inseguridad reinante y la amenza de guerra civil. Los barcos que zarpan de Dili parten sobrecargados y el único vuelo al exterior, que sale cuatro veces por semana, tiene todo reservado para las próximas jornadas.
El líder independentista Xanana Gusmao, que cumple desde 1992 una condena de 20 años de cárcel, estará la próxima semana en su casa, según el ministro de Justicia, Muladi.
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