El alcalde niega haber favorecido a un amigo constructor en un barrio del norte

El alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, negó ayer haber favorecido a su amigo Florentino Pérez, máximo responsable de la constructora OCP, en el convenio firmado para el desarrollo de Las Tablas, un barrio situado al norte de Madrid donde se levantarán 12.272 viviendas.OCP fue la empresa contratada por la mayoría de los propietarios de Las Tablas para urbanizar los terrenos. El portavoz socialista, Juan Barranco, considera que el proceso fue anómalo, pues los propietarios de ese suelo tendrían que haber sacado a concurso la urbanización y optar por la constructora que ofreciera los precios más baratos. Además, el dirigente socialista considera que OCP se ha erigido, sin poseer ni un metro cuadrado de suelo, en la empresa que gestiona el nuevo barrio en exclusiva. Álvarez del Manzano; su concejal de Urbanismo, Ignacio del Río, y el propio Florentino Pérez negaron ayer las acusaciones del portavoz socialista.

Desesperado

Álvarez del Manzano replicó que Barranco está "cada día más desesperado" y le acusó de conocer "cada vez menos los temas del Ayuntamiento". Para el regidor del PP, las denuncias de su adversario político sólo obedecen a que, a partir de ahora, "la campaña electoralista será a base de imputaciones de comisión de delitos". El edil Del Río defendió el derecho de los propietarios a elegir a las constructoras que les urbanizarán los terrenos. Florentino Pérez llamó a este periódico para explicar que los cerca de 700 propietarios de Las Tablas optaron por contratar a OCP para asegurarse la viabilidad financiera del proyecto. "Ellos no tenían dinero para pagarnos por adelantado y decidieron darnos suelo para viviendas protegidas". Pérez se mostró muy contrariado con las acusaciones del portavoz socialista, que, según dijo, rechazan significados dirigentes de su partido, aunque no precisó sus nombres.

Uno de los propietarios del futuro barrio de Las Tablas, Vicente Plaza, ha presentado una demanda judicial contra el Ayuntamiento por firmar un convenio urbanístico que considera ilegal. "Tengo un acta notarial", señaló Plaza, "que demuestra que en una reunión de la comisión gestora se explicó que el Ayuntamiento había exigido que se negociara con una constructora determinada la urbanización de los terrenos para que las cosas fueran más fáciles".

Del Río aseguró ayer que la inmensa mayoría de los propietarios está a favor del convenio.