La Junta calcula que dentro de una década los ingresos por turismo alcanzarán los 2,5 billones

La Consejería de Turismo y Deportes que dirige el andalucista José Núñez ha cargado de ambición sus objetivos a medio plazo. Sus previsiones estiman que el sector en Andalucía atravesará nueve años de crecimiento constante, de forma que en el año 2008 se alcanzarían las cifras de 25 millones de visitantes y en torno a 2,4 billones de pesetas de ingresos, lo que situaría a la región como la primera comunidad española en movimiento y producción turística. Para conseguir este tirón, además de consolidar los mercados emisores tradicionales, la Junta confía en atraer a norteamericanos y japoneses.

La Feria Internacional de Turismo (Fitur 99) que se celebra en el Campo de las Naciones de Madrid ha dejado constancia de la euforia con la que el sector turístico, y especialmente la Administración pública relacionada con él, vive el presente y contempla el futuro. Si desde 1994, ejercicio en el que comenzó el despegue del sector, la acogida de los excelentes balances anuales estaba acompañada de cautela en la predicción del futuro inmediato, ahora se ha producido una explosión de confianza y optimismo en el medio y largo plazo. Las previsiones hasta el año 2008, por ejemplo, significan un crecimiento del 39% en número de viajeros y superior al 41% en ingresos. Es decir, que para que las previsiones se cumplan se requiere que en la década que viene se mantenga un ritmo anual de crecimiento del 4%, el tope optimista de la estimación oficial para el presente año. En 1998, visitaron Andalucía un total de 18 millones de turistas para una producción de 1,3 billones de pesetas. El consejero José Núñez explicó ayer que Andalucía está asistiendo en la actualidad "al nacimiento de un nuevo turismo que crece y se modifica, que no se mueve en tendencias, y que demanda una más amplia oferta de ocio". El titular de Turismo y Deportes de la Junta argumentó que, al revés que lo ocurrido hace unos años, en 1998 ha quedado constancia de que la cuenta de resultados del sector turístico no está ya a expensas de los episodios de crisis económicas nacionales o internacionales. La revolución del ocio El ocio, según explicó José Núñez, será la gran industria del siglo XXI y por primera vez en la historia una "revolución" económica coge a Andalucía en una buena posición. Sin embargo, el consejero del ramo advirtió: "No podemos permanecer en una actitud pasiva pensando que nos van bien las cosas; hay que trabajar en trazar estrategias y en aumentar nuestra oferta". Y en esta línea se inscriben los esfuerzos promocionales en segmentos cuya puesta en valor todavía es escasa: gastronomía, cultura, naturaleza, deportes y aventuras, parques temáticos y de ocio. Conocido ya que los dos principales clientes extranjeros de Andalucía -Reino Unido y Alemania- pueden volver a crecer este año, la empresa pública Turismo Andaluz pretende en 1999 intensificar la promoción en otros mercados consolidados pero un tanto estancados como Bélgica y Francia, y en otros considerados emergentes, como son Estados Unidos y Japón.