Un misionero y sus dos hijos mueren calcinados en la India

Un misionero cristiano de origen australiano, Graham Stewart Staine, de 58 años, y sus dos hijos, Philip, de 10 años, y Timothy, de 8, murieron ayer cuando su vehículo fue incendiado por desconocidos, en el Estado de Orissa, en la India. Los tres venían del municipio de Baripada, donde habían asistido a una reunión en la iglesia local, y en donde se quedaron la mujer del misionero y su hija. "Estaban durmiendo en el interior del coche cuando unos infieles le prendieron fuego", dijo ayer un oficial de la policía local, quien aseguró que los tres ocupantes del vehículo ardieron vivos. El ataque fue condenado por el primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee, quien, tras expresar su dolor por el incidente, pidió que se actuase con rapidez para castigar a los culpables.En las últimas semanas, quienes parecen ser terroristas de extrema derecha hindú han estado aterrorizando a la comunidad cristiana del Estado de Gujarat, quemando iglesias y atacando a los sacerdotes. Hasta el momento, nadie se ha atribuido la responsabilidad de la violencia.

Los activistas hindúes acusan a los misioneros cristianos de convertir a los pobres por la fuerza, mientras que éstos aducen que sólo proporcionan caridad. La comunidad cristiana supone un 3% de la población india -960 millones de habitantes-, mientras que los hindúes son el 80%.