El diestro José Tomás exige dos tardes en la Feria de las Fallas de Valencia

"Sin alharacas y sin historias: o dos tardes o ninguna". La frase, pronunciada el viernes desde México, corresponde a Enrique Arranz, apoderado de José Tomás. El representante del diestro contesta así al empresario de la plaza de Valencia, Roberto Espinosa. En los planes de este último sólo se contempla una presencia del torero en la feria de las Fallas. Sus compañeros Enrique Ponce, Vicente Barrera y El Juli, sin embargo, disponen de dos oportunidades."Confío en que haya acuerdo. Nosotros, desde luego, tenemos muchísimo interés en que José Tomás acuda a Valencia", afirma el empresario. Para demostrar la buena disposición de la plaza, Espinosa se detiene en sus esfuerzos para convencer al diestro: "El día antes de que se fuera a América, quise acercarme al aeropuerto para comunicarle la propuesta cara a cara, sin la frialdad del teléfono. Un viaje que supuso salir de Valencia a las cinco de la mañana. Lo que me encontré por parte de Enrique fue el rechazo absoluto. Pese a esto, no hay nada definitivo".

Arranz, por su parte, insiste: "No queremos perder el tiempo. Sería una lástima no poder acudir a una de las primeras citas importantes del año, pero hay más plazas y no nos vamos a poner nerviosos. Nuestro objetivo no es figurar en los puestos más altos del escalafón ni acudir a todos a los sitios. Nos proponemos hacer unas 50 o 60 corridas y faltar a Valencia en Fallas no lo va a impedir. Lo dicho, dos o nada".

El apoderado además cita el precedente del año pasado para apoyar su postura. La temporada 98, José Tomás sólo consiguió entrar en los carteles en sustitución de Joselito. Entonces, la misma exigencia de dos tardes le dejó en un principio fuera de la feria. "Creo que con lo ocurrido en la temporada anterior, es más que lógico exigir lo que a todas luces es justo. Además la situación de Tomás el año pasado y ahora ha cambiado mucho. De por medio hay una temporada de triunfos que nadie puede negar", concluye el apoderado.

En el otro lado de la balanza, Espinosa se lamenta de que la feria no sea más larga. "No hay sitio para más. Poner a Tomás dos tardes significaría quitar a alguien. Si hablamos de justicia, eso tampoco es justo", declara. El empresario justifica la presencia por duplicado de Ponce, Barrrera y El Juli echando mano a la exigencia de la afición: "Son tres toreros con muchísimo predicamento en Valencia. Son de la tierra y dejarles con una corrida sería injustificable".