Las encuestas electorales de Convergència son más optimistas que las encargadas por Unió

VIENE DE LA PÁGINA 1 Los nervios parece que se han apoderado de la clase política catalana, mientras Pujol guarda celosamente su secreto. La posición del aparato de CDC se acaba imponiendo a la de importantes sectores del Consell Executiu. Las encuestas de Line Staff, la empresa que trabaja desde hace años para la Generalitat, situaban a CiU entre 59 y 61 diputados en el mes de octubre. No se conocen más encuestas por parte de CDC. Algunos sondeos encargados por Unió no son tan generosos y se mueven más hacia los 55 que hacia los 60 diputados. En el momento de anunciar su decisión, Pujol tenía aún sobre la mesa la necesidad de cerrar cuanto antes el pacto municipal con sus socios de Unió, un asunto que ha sido un gran quebradero de cabeza durante bastantes meses. Ahora éste acuerdo ya está cerrado. Pero, también, y más importante, el presidente de la Generalitat quiere buscar una salida al caso Duran, que pasa por impedir que se consume el proyecto de que ocupe el octavo lugar en la lista nacionalista al Parlament. Se trata de un asunto que se puede reabrir en cualquier momento. El líder democristiano tiene el apoyo de su partido y algunos sectores de CDC no verían con malos ojos que fuera de número dos. La prolongación de la legislatura también tropieza con el problema de la situación del gobierno catalán. Hay que reforzar, según Pujol, el ejecutivo -sin cambios, contra el criterio del aparato de CDC- con una batería de iniciativas parlamentarias. Y, en definitiva, posponer la fecha hasta otoño de este año perjudica a Maragall, a quien Pujol espera poder coger suficiente distancia gracias a la campaña sobre el pacto fiscal.