El PSPV no se plantea la posibilidad de una moción de censura a Zaplana pero EU dice que la apoyaría

El secretario general del PSPV, Joan Romero, afirmó ayer que su organización "no ha dedicado ni un minuto" a estudiar una posible moción de censura contra el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana. La moción de censura se esgrimió como una amenaza por parte de Unión Valenciana ante la posibilidad de que el Partido Popular decidiese mantener a María Ángeles Ramón-Llin al frente de la Consejería de Agricultura. Para el dirigente socialista y candidato a la presidencia de la Generalitat, "una moción de censura hubiese tenido una lectura muy complicada por parte del electorado". Romero recalcó que en ningún momento se planteó la posibilidad de una moción de censura pero anunció que el próximo lunes planteará a la ejecutiva del PSPV la necesidad de intensificar la labor parlamentaria hasta el final de la legislatura. "Creo que es necesario incrementar las iniciativas parlamentarias que garanticen la pluralidad de la Cámara", dijo Joan Romero, que añadió que no descarta que el Grupo Socialista en las Cortes Valencianas pueda presentar iniciativas para garantizar la pluralidad en los medios de comunicación públicos -especialmente en Canal 9- o solicitudes de comisiones de investigación para esclarecer actuaciones oscuras de la Administración. El coordinador general de Esquerra Unida, Joan Ribó, aseguró ayer que su formación estaba dispuesta a apoyar una moción de censura contra el presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, en caso de que se hubiera consumado la ruptura del pacto de gobierno entre el PP y UV tras la decisión de Ramón-Llín de renunciar a su afiliación regionalista. "Esquerra Unida hubiera puesto toda la carne en el asador", dijo Ribó, que aseguró que su partido hubiese estudiado la matemática parlamentaria para desalojar de su cargo a Zaplana, que "ha aprovechado de su cargo para hacer partidismo". Para el dirigente de Esquerra Unida, la operación del PP sobre Unión Valenciana de los últimos días recuerda "cómo accedió Eduardo Zaplana a la alcaldía de Benidorm, a través de la compra de voluntades". Joan Ribó explicó que comportamientos como los registrados en los últimos días por parte de los populares y de Eduardo Zaplana van en contra de la "limpieza democrática". El responsable de Esquerra Unida se mostró convencido el pasado miércoles de que populares y regionalistas alcanzarían un acuerdo para no romper su pacto.