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Barberá anula la compra del suelo para los ecoparques y reconoce que tuvo un "mal final"

El expediente de la compra de suelo para los ecoparques es "absolutamente legal", pero tuvo un "mal final". Con este argumento justificó ayer la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la decisión del equipo de gobierno de anular la operación, en la que la oposición ha denunciado la existencia de un pelotazo. La empresa Ceryp, SA, obtuvo un beneficio de 56 millones de pesetas -algo que el secretario general de la Corporación calificó de "enriquecimiento anormal"- ya que compró dos solares que poco después vendió por el doble al Ayuntamiento. Para resolver lo que la oposición considera un "delito consumado", el Ayuntamiento recuperará el dinero pagado a Ceryp y permutará los terrenos.

"No me importa tener que rectificar, en aras de la transparencia; ha habido un mal final y se corrige". La alcaldesa descartó ayer con estas palabras la interpretación de que la decisión del equipo de gobierno de deshacer la compra de suelo para los ecoparques suponga un reconocimiento de que la operación fue ilegal. "Ha sido un expediente absolutamente legal pero con un mal final. Ese final no lo queremos así y se ha hablado con la empresa", insistió. "No queremos amparar el enriquecimiento anormal del que habla el secretario", agregó Rita Barberá, quien aseguró que el Ayuntamiento no ha dado nada a cambio a Ceryp. El expediente de la compra de los ecoparques se ha caracterizado por la rapidez con que ha superado las diversas etapas, especialmente al final. El Ayuntamiento se dio mucha prisa para comprar los solares que ofrecía Ceryp, y parecía tener mucha prisa en cerrar la operación, porque aceleró la devolución de la fianza depositada por la empresa, que ésta vio reintegrada en cuestión de días cuando normalmente es un trámite que dura meses. Finalmente, el equipo de gobierno también se ha dado una inusitada prisa para deshacer lo que la oposición ha tachado de caso claro de pelotazo. Las prisas han sido justificadas porque se puede perder una partida de ayudas de la UE. Cuando los socialistas denunciaron el pelotazo, el PP solicitó un informe al secretario general de la Corporación. Éste señalaba que se había producido un "enriquecimiento anormal" y proponía "enderezar" el expediente mediante una solución que el PP hizo suya en el último pleno de 1998 y a la que ayer la comisión de gobierno dio el visto bueno definitivo. La solución pasa por dejar sin efecto el pago a Ceryp, que consiente en devolver el dinero a cambio de una compensación en especie, en forma de solares edificables. Lo curioso es que esta posibilidad ya la anticipó Ceryp cuando ofreció al Ayuntamiento los terrenos que había comprado para los ecoparques, en Poble Nou y Vara de Quart. Otra curiosidad de la solución aprobada es que la tasación de los solares destinados a los ecoparques y de aquellos de propiedad municipal con los que se pague a la empresa -trámite necesario para calcular cuánto suelo edificable corresponde a Ceryp- no la efectuará el Servicio de Patrimonio, sino que será encomendada al Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria y a la Universidad Politécnica. Fuentes socialistas destacaron ayer que esta decisión sienta un precedente, porque nunca hasta ahora había sido encomendada a terceros una tarea de estas características, y mucho menos al citado colegio. También es curioso que el edil Silvestre Senent, delegado de Medio Ambiente y responsable de la operación, se enterara del informe del secretario general porque se lo facilitaran los periodistas en la recepción oficial que la alcaldesa ofreció con motivo de la Navidad, celebrada el 23 de diciembre, y que la carta con la que la empresa acepta devolver el dinero y cobrar en especie fuera firmada ese mismo día.

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