Hacienda refinancia 53.000 millones de deuda
José Luis Olivas, consejero de Hacienda, trasladó ayer 53.000 millones de deuda de corto a largo plazo. Olivas justificó la medida a partir de la situación actual del mercado financiero que permite refinanciar las obligaciones a un bajo interés, pero la medida delata evidentes tensiones de tesorería y la imposibilidad de afrontar vencimientos inminentes. El pasado mes de julio el Consell autorizó una medida similar por un montante de 48.854 millones. Hacienda ha dilatado así en seis meses el pago de más de 100.000 millones de pesetas, casi un 10% de su presupuesto global.
Históricamente la deuda a largo plazo ha sido emitida para afrontar grandes inversiones en infraestructuras que difícilmente pueden ser cubiertas con los presupuestos ordinarios. La deuda a corto plazo, que no solía computarse a la hora de establecer las obligaciones de las administraciones públicas, corresponde al mecanismo ordinario para cubrir pagos urgentes propios del funcionamiento diario. Olivas tuvo un severo enfrentamiento con el Banco de España a propósito del volumen de la deuda de la Generalitat correspondiente a 1997, cuando la entidad emisora consideró el monto total de deuda a corto y largo plazo como una sola factura pendiente. Pero la modificación de criterios del Banco de España se ha convertido en un mecanismo que Olivas utiliza ahora para salvar problemas inmediatos. Pero la posibilidad de liberar fondos para afrontar costes ordinarios y refinanciar la deuda calificándola a largo plazo se consolida como una obligación para futuras administraciones que verán mermada su capacidad de maniobra. A la modificación de deuda de corto a largo plazo hay que sumar las obras financiadas según el denominado modelo alemán o el plan de financiación de las obras en las universidades, cuyo pago se ha dilatado 25 años a partir de la emisión de deuda por las propias instituciones con la garantía de la Generalitat. Entre los asuntos que han contribuido a generar tensiones de tesorería se cuenta un acuerdo que el Consell presentó ayer como un logro. El pleno autorizó la firma de un convenio con el Ministerio de Hacienda para que el Estado asuma el pago de gran parte de las obras del metro de Valencia. Según la Generalitat, el convenio supondrá la aportación de 26.047 millones de pesetas entre los años 1998 y 2001. Un total de 14.072 millones corresponden a obras ejecutadas en el periodo comprendido entre 1994 y 1997. Pedro Solbes, ministro de Hacienda del último Gobierno socialista, y Aurelio Martínez, consejero de Hacienda del último Consell presidido por Joan Lerma, acordaron que el Estado cubriría un tercio de las obras desarrolladas por el Ferrocarril Metropolitano de Valencia en paralelo a pactos similares alcanzados con Ferrocarrils de Catalunya o el Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid. El acuerdo preveía la transferencia de unos 5.000 millones anuales de parte del Estado. La cantidad figura en la liquidación correspondiente a los presupuestos central y autonómico de 1994. Pero desapareció de las cuentas autonómicas a partir de 1995. La Generalitat dejó de reclamar los fondos correspondientes a tres años, que son precisamente los que Rato trasladará a Olivas con la firma del nuevo convenio. El Consell también aprobó avalar al Instituto Valenciano de la Vivienda (IVVSA) para garantizar operaciones de crédito por un montante total de 20.000 millones. El crédito permitirá cubrir las subvenciones que distribuye el Consell y pretende dotar las operaciones pendientes para agilizar los trámites y las adjudicaciones a los particulares que las hayan solicitado. José Joaquín Ripoll, portavoz del Consell, aludió a la falta de cobertura del último plan de vivienda que fue ejecutado por la Administración socialista, otro de los argumentos polémicos sobre los que Olivas construyó el agujero financiero con el que dijo tropezar al acceder a la Consejería de Hacienda. Según Ripoll, el Consell ha multiplicado por cuatro las subvenciones para compra de vivienda entre los años 1996 y 1999, en relación con el cuatrienio anterior. El IVVSA cedió recientemente a varias entidades financieras los créditos que tenía pendientes sobre el parque de viviendas que subvenciona por un total de 12.000 millones.
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