Viudas

Me dirijo a todas las viudas españolas, con todos mis respetos y consideración. Sabéis que a lo largo y ancho de España hay un sinfín de colectivos, asociaciones y agrupaciones de mujeres que constantemente reclaman del Estado, de la sociedad y de los hombres vuestros derechos igualitarios en todos los menesteres en que os movéis, lo cual es perfectamente legítimo; pues demostrado está que tanto monta, monta tanto; pero hay una reivindicación que se escapa mucho a la mayoría y que atañe directamente a vuestras vidas futuras. El Estado os discrimina de forma machista y arbitraria en las prestaciones de pensiones, en la viudedad, asignando un 45% que está muy por debajo de necesidades y derechos adquiridos en vida por vuestros maridos, a los que habéis contribuido en forma de sacrificio y entrega prescindiendo de unos emolumentos que les rebaja la Seguridad Social; precisamente para asegurarse esa vejez o viudedad. Ante esta situación tan discriminatoria de un tanto por ciento tan bajísimo, que desequilibra vuestras vidas en lo moral, económico y social, debéis uniros todos esos colectivos nacionales haciendo una fuerza común, exigiendo, incluso amenazando con la abstención de vuestros votos, para que se repare esta desigualdad. Mucho más se podía escribir sobre las razones que tenéis, que lo sabéis, pero sólo os llamo a la unión para pedir en justicia lo vuestro.- .