Ecologistas en Acción reclama un paro biológico en la pesca de gambas

Ecologistas en Acción ha alertado sobre la situación en la que se encuentran los caladeros de pesca de gamba roja en la provincia almeriense. La denuncia advierte de que "el agotamiento de los caladeros de gamba roja, por una serie de causas en las que parecen concurrir diversos factores como el aumento del caballaje de los barcos de pesca y el ciclo biológico reproductivo de esta especie, sitúa tanto a este recurso natural como al sector que de él depende en una situación crítica". La implicación directa de la Junta es para los ecologistas una de las primeras medidas que deberían adoptarse. Piden que la Consejería de Agricultura y Pesca conceda los suficientes recursos financieros como para permitir que las flotas pesqueras de Garrucha y Carboneras -los dos municipios costeros de Almería más afectados por la situación de los caladeros de gamba roja- puedan afrontar un paro biológico de dos o más meses al año. Pero no es suficiente invertir fondos públicos para que la flota pesquera no se resienta por el paro biológico que los ecologistas consideran necesario. Esta medida, según Ecologistas en Acción, debe acompañarse con un plan de investigación sobre el ciclo biológico de la gamba roja, a la que califican como "especie amenazada". Control de mallas También consideran los ecologistas que las cofradías de pescadores deben contribuir controlando de una forma efectiva las mallas de las artes de pesca. "Eso serviría para establecer, en acuerdo con la Administración, un plan de utilización de recursos que regule zonas de veda de pesca, así como un horario de trabajo y de rotación de pesca por barco que disminuya cuantitativamente la presión sobre los recursos de gamba roja, actualmente en peligro de extinción", aseguran los ecologistas. La situación en la que actualmente se encuentran los caladeros de gamba roja en Almería no sólo afecta a los pescadores. Empresarios hosteleros de la zona ya han comenzado a manifestar su preocupación por esta situación. "Hace ya varios años que notamos que la pesca de la gamba roja va a menos. Eso nos obliga a subir los precios y hay ocasiones en las que ni siquiera podemos comprar porque los precios son muy altos", dicen. Tomar medidas inmediatas para que se solucione esta situación repercutiría, según Ecologistas en Acción, en un mantenimiento de la biodiversidad de la fauna marina y contribuiría también a evitar la pérdida de muchos puestos de trabajo que están relacionados con el sector pesquero de la zona. Otro de los aspectos que los ecologistas consideran como positivo es que, atendiendo a sus demandas, se podría "garantizar que el necesario paro biológico no se transforme en una coparticipación despreocupada de un proceso incontrolado de esquilme de recursos naturales".