Fusión de dos consorcios de Alemania y Suiza

El consorcio Viag, una de las seis empresas industriales más importantes de Alemania, y el grupo suizo Alusuisse-Lonza confirmaron ayer su fusión, tras superar algunos problemas de impuestos que habían bloqueado el acuerdo hasta ahora. La operación, una de las mayores fusiones industriales europeas de los últimos tiempos, se realizará antes de agosto de 1999 y la sede central de la nueva compañía estará en Munich.El nuevo consorcio germano-suizo tendrá un volumen de negocio anual de 53.000 millones de marcos (4,5 billones de pesetas), unos beneficios de 1.600 millones de marcos (136.000 millones de pesetas) y más de 120.000 empleados. La fusión se hará por intercambio de acciones, siguiendo el modelo que emplearon Daimler y Chrysler.

Ambas empresas informaron ayer que sus respectivos accionistas han aprobado ya la operación. Por cada una de las acciones de la Viag, los accionistas recibirán 10 de la futura sociedad y por cada una de Alusuisse, 21,7.

Tanto Viag como Alusuisse-Lonza desarrollan actividades en el campo de los embalajes, sustancias químicas especiales y aluminio. La fusión costará el empleo a 2.540 personas, mediante jubilaciones anticipadas. Los sindicatos suizos de Construcción e Industria han anunciado que se opondrán a la pérdida de puestos de trabajo.

Los planes de fusión deben ser sometidos todavía al dictamen de las autoridades antimonopolio. El Gobierno del Estado de Baviera, que tiene el 25% de las acciones de Viag, disminuirá su participación en el consorcio a menos del 20%. "Nuestras actividades industriales encajan como una llave en una cerradura", dijo ayer Wilhelm Simson, el director de Viag. Simson, que estará también a la cabeza del nuevo grupo, explicó que la estructura de éste debe descansar sobre dos pilares, el campo industrial y el energético. Viag posee la empresa Bayernwerk, el tercer consorcio eléctrico alemán.