Antípodas

Apuntándose del modo más gratuito y hasta grotesco a la actual ola neopuritana europea, nos están repitiendo hasta la saciedad la publicidad de una marca de automóviles que, sin temor al ridículo, nos presenta una falsa diosa del amor, una Afrodita o Venus comercializada, que nos tienta con algo que declara ser "mucho mejor" que los placeres del amor: una oferta en la gama diesel. Hemos llegado a las antípodas de aquellos anuncios que hasta ayer nos presentaban un auto como una manera de ligar. Quienes ahora encuentren a alguien que tenga un coche de esas características ya pueden sospechar con razón qué es lo que éste en realidad prefiere...- . .