PP y PNV se cruzan acusaciones sobre la política penitenciaria

El secretario general del PP vasco, Carmelo Barrio, afirmó ayer, en declaraciones a Europa Press, que es el momento de la serenidad en materia penitenciaria, al tiempo que criticó las declaraciones "incendiarias" vertidas por el presidente del PNV, Xabier Arzalluz, en las que exigía el acercamiento a Euskadi de los presos vascos. "Este no es el momento de la presión ni de la crítica furibunda, sino de la serenidad", aseguró. El portavoz del PNV en el Congreso, Iñaki Anasagasti, hizo declaraciones precisamente en tono contrario asegurando que la "cerrazón" del Gobierno central en la defensa de su política penitenciaria está "envenenando" la situación política. "Se están envenenando las cosas por una cerrazón absoluta del PP y al final la sociedad va a cantar que quien no quiere arreglar la situación es el Ministerio del Interior", aseguró. Anasagasti recordó que después de la resolución del Congreso de los Diputados sobre política penitenciaria, el Ejecutivo debiera hacer una política "más flexible, más dinámica e inteligente" y hace "lo contrario". "El PP se han atrincherado, diciendo que no van a hacer nada", señaló el portavoz peneuvista. Barrio apuntó que esta semana el Estado ha vivido "momentos importantes" con la proposición no de ley aprobada por el Congreso y arremetió contra las declaraciones realizadas por Xabier Arzalluz, presidente del PNV, en las que pedía el acercamiento de los presos etarras antes de las próximas Navidades, para evitar que los ciudadanos salgan a la calle a manifestarse, calificándolas de "incendiarias". "Eso no es bueno para la situación, sino afán de protagonismo", espetó Barrio. Según su criterio, el Gobierno central está dando los pasos adecuados: "Va a haber muchas conjeturas y presiones para que se actúe de determinada manera, pero el Ejecutivo no cae en la presión de un determinado líder que en un determinado momento le convenga decir alguna serie de cuestiones". Agregó que es necesario que ETA acredite que deja definitivamente las armas.